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futbol@eluniversal.com.mx
Guadalajara.— 29 de junio de 1986. A través del televisor, el pequeño Matías ve a su ídolo, Diego Armando Maradona, proclamarse campeón del mundo. Argentina ha vencido a los alemanes por 3-2. La cancha del majestuoso Estadio Azteca es testigo del ascenso del mítico 10 al pedestal del que nunca más habrá de bajar.
El niño festeja la coronación de su país. Se apellida Almeyda. Aquel imborrable partido se disputa en el mismo escenario donde, días atrás, Maradona había marcado ante Inglaterra un tanto con ayuda de la “mano de Dios” y otro al que desde entonces se le conoce como el “gol del Siglo”. El Coloso de Santa Úrsula resulta especial para el pueblo argentino.
Matías toma entonces una hoja de papel. Ha decidido escribirle al ídolo. Es una carta cargada de toda la ilusión infantil y agradecimiento por lo que sus ojos acaban de ver. Argentina está en la cúspide. Almeyda hila palabra, una tras otra, para el ahora legendario futbolista.
Casi 20 años permanece guardada. La madre de aquel pequeño la conserva. Es en 2005 cuando el ya futbolista visita al mito viviente en su programa televisivo, La Noche del 10, donde le entrega aquel papel cargado de su emoción infantil. Hoy, Matías Almeyda es técnico de Chivas y este sábado, en el Azteca, dirigirá su primer Clásico frente al América. Pisar esa cancha es un sueño hecho realidad.
“Y justo hoy estaba mirando una foto... recuerdo que tenía 12 años cuando Diego fue el más grande de todos, convirtiéndose acá en México. Yo en ese momento le escribí una carta que le pude entregar hace unos años, mi mamá la había guardado”, recuerda.
“Realmente para los argentinos es algo especial. Digamos, Argentina ha sido conocida y reconocida por él, por ese futbol que ha transmitido y que ha contagiado, que muchos hemos disfrutado, así que para nosotros los argentinos es especial. Veo ese estadio y veo la foto de Diego”, añade el estratega.
La mirada se le ilumina cuando EL UNIVERSAL le cuestiona sobre el sentimiento que le embarga a unas horas de visitar el campo que inmortalizó a Diego Maradona. Desde ahora se saborea el Clásico Nacional y espera, por supuesto, que la celebración sea rojiblanca.
“Creo que va a ser un marco lindo, habrá mucha gente de Chivas y ojalá que sea una fiesta”.