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daniel.blumrosen@eluniversal.com.mx
Caer en Tuxtla Gutiérrez, frente a los Jaguares de Chiapas (1-2), reactivó los cuestionamientos en torno al Cruz Azul, pero el calendario le otorga un dorado obsequio: recibir a su genuino ‘cliente consentido’.
Hoy, los Xoloitzcuintles de Tijuana visitan el estadio Azul, donde fueron derrotados en cada una de sus cuatro visitas previas, lo que inyecta ánimo al equipo dirigido por Sergio Bueno.
Richard Ruiz sabe bien lo difíciles que son, para los fronterizos, las expediciones a la antigua Ciudad de los Deportes. Fue parte del club norteño en cada uno de esos duelos y anhela que la hegemonía celeste se mantenga.
“Le tiene que pesar [la visita]”, sentencia el volante de los Cementeros, quien debutó con los ‘Xolos’ en la hoy llamada Liga MX. “Debemos estar al 100% y demostrar en la cancha que somos mejores, haciendo buen futbol, aprovechando todo lo que tengamos y que no haya descuidos”.
Esos que les costaron la derrota en La Selva, más allá del polémico arbitraje de Eduardo Galván.
Serio, Ruiz confiesa que los bajacalifornianos suelen pasarla mal en el hogar azul porque su anfitrión “es un equipo grande y cada vez que veníamos, quieras o no, la cancha pesa, nos costaba mucho. Hay que aprovechar eso y darle con todo para no aflojar en algún momento”.
Lo hicieron la semana anterior, contra el León, aunque los Cementeros no olvidan el estrepitoso debut ante el Morelia. Aquella goleada (0-3) es un doloroso recuerdo y el acicate para no confiarse como locales. En ese partido agotaron todo el margen de error que tenían en casa. Ya no hay espacio para dejar ir puntos.
“[Aprovechar la localía] es clave para todos los equipos”, recuerda el futbolista chiapaneco. “Hay que sacar ventaja en casa, no dejar ir algo”.
“Ya perdimos tres puntos, nos dolió mucho, pero hay que estar conscientes de que siempre debemos ganar en casa... Como sea”.
Filosofía que aplicarán frente a un conjunto que suele languidecer sobre el césped del Azul. Iniciaron la quinta jornada como décimos de la tabla, pobre lugar para un equipo armado con el objetivo de dar la vuelta olímpica.
“Es ganar sí o sí... Y en cada partido, no nada más mañana [hoy]”, advierte Ruiz. “Todos queremos eso, pero en el futbol no siempre es estar arriba”.
“Nos ocupamos para seguir trabajando y mejorar lo que estamos haciendo mal, con el fin de que no sigan pasando errores. El equipo está consciente de que debemos estar arriba en la clasificación, no a la mitad. Tenemos un buen plantel para pelear y estar en los primeros lugares”.
Mentalidad compartida, según él, por todos. Pese a que la irregularidad la ha distinguido en el inicio del Apertura 2015, La Máquina está diseñada “para pelear el título. Todos venimos conscientes de que, no nada más debemos hacer un buen torneo, tenemos que pelear el título y ganarlo”.
Por lo que no hay tiempo para sentimentalismos, ni siquiera frente al club que lo formó como jugador.
“Es un partido más. Estoy muy agradecido, contento, por todo lo que viví en ‘Xolos’, pero ya pasó”, afirma. “Ahora estoy aquí, en Cruz Azul, es una nueva etapa, y a defender los colores”.
Para mantener el dominio sobre la fronteriza jauría.
