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Madrid.— Solo. Con la única compañía del folio que contenía el discurso de su despedida, el meta Íker Casillas compareció en la sala de prensa del estadio Santiago Bernabéu para cerrar una etapa de 25 años como jugador del Real Madrid.
Sin el homenaje que habría merecido su larga hoja de servicios a la entidad (tres Ligas de Campeones, un Mundial de Clubes, dos Copas Intercontinentales, dos Supercopas de Europa, cinco Ligas, dos Copas del Rey y cuatro Supercopas de España), el ya arquero del Porto vivió en soledad un momento que él mismo, cuando las lágrimas se lo permitieron, calificó como “especial”.
Dos razones ofreció el madrileño, de 34 años de edad, para justificar su adiós. “La primera, la ilusión que me han transmitido el presidente [del club lusitano, Nuno Pinto da Costa], el director Antero [Henrique] y el entrenador Julen [Lopetegui]”, explicó Casillas. “Y segundo, las muestras de cariño que he ido recibiendo a lo largo de estos días, cuando —más o menos— la gente podía saber ya que mi destino era Portugal”, agregó.
Allí se refugiará el ex capitán de los Merengues, quien se mostró desconsolado en las que fueron sus últimas fotografías en el Santiago Bernabéu. Ya había advertido, no obstante, a los periodistas presentes durante su comparecencia, que las lágrimas brotarían.
“El leer esto son 30 segundos. Lo que pasa es que al final tardaré una hora”, adelantó. Ocho minutos duró finalmente su intervención.
Más tiempo necesitaría para resumir sus 16 temporadas en el primer equipo blanco, con el que se estrenó el 12 de septiembre de 1999.
“Después de 25 años defendiendo el escudo del equipo más grande del mundo, llega un día difícil. Éste, en mi vida deportiva, el de decir adiós a esta institución que me lo ha dado todo”, dijo. “Por encima de ser un buen o un mal portero, sólo espero que la gente se acuerde de mí por haber sido buena persona”.
Casillas dedicó también unas palabras de recuerdo a todos los compañeros y los entrenadores con los que coincidió.
No hubo reproches en sus palabras, pero el diario El Mundo publicó una entrevista con los padres del guardameta, en la que éstos acusan al presidente blanco, Florentino Pérez, de haber montado “una campaña de desprestigio” desde 2010, para lograr la salida del jugador.
La madre de Casillas consideró, incluso, al Porto como “un equipo de Segunda B para una persona de la categoría de Íker”.
‘Chicharito’ se despide. En su cuenta oficial de Twitter (@CH14_), Javier Hernández mostró el orgullo que le provoca haber coincidido con Casillas: “Un privilegio poder decir que fui compañero del mejor portero en la historia del Real Madrid...”.
