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Ninguna victoria, ningún título hará olvidar la herida del 7-1 ante Alemania, pero Brasil comienza hoy en la Copa América ante Perú un proceso de cicatrización que sólo se completará con triunfos.
Brasil es una incógnita en el primer torneo después del “Mineirazo”. Llega a Chile en pleno proceso de reconstrucción y de conformación de una identidad, encargado a Carlos Dunga. Se desconoce si puede pelear por el título o caer en primera ronda, aunque los diez triunfos en los diez amistosos de la segunda era Dunga, que ya dirigió al equipo de 2007 a 2010, invitan a pensar en lo primero.
“Los buenos resultados son importantes, porque elevan la confianza del grupo”, afirma el técnico, sin darle valor al escepticismo de su afición.
Sabe que el proceso para recuperar la confianza de la afición será largo.
“Tenía que haber un cambio general, independientemente del Mundial. Aunque Brasil hubiese ganado, sería necesario cambiar, porque el mundo está en evolución”, argumentó hace unos días Dunga.
Café y vino tinto. La selección de Colombia buscará ratificar desde el arranque su condición de favorito a ganar la Copa América de futbol cuando se mida hoy a Venezuela en Rancagua, en el inicio del Grupo C del certamen continental.
Con figuras de renombre como Radamel Falcao, James Rodríguez, Carlos Bacca o Juan Guillermo Cuadrado, Colombia llega al certamen en Chile como firme candidato. Venezuela quiere ser la sorpresa de la Copa América.
