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Marco Fabián quiere quitarse la espinita, una espinita que se clavó muy hondo allá en Ecuador.
En 2011, un pecado de juventud, llevar prostitutas a su cuarto mientras el equipo estaba concentrado en Quito, previo a la Copa América de Argentina, lo sacó del torneo y lo excluyó de la Selección Nacional Mexicana por seis meses, además de tener que pagar una multa de 50 mil pesos.
Hoy, cuatro años después, un Fabián de la Mora más maduro, más pensante, quiere reivindicarse y olvidar, sepultar por fin, todo aquel error del pasado.
“Eso ya quedó atrás. No niego mis errores, pero eso ya quedó muy atrás”, dijo el volante de las Chivas, quien con 25 años se erige como uno de los jugadores principales del equipo mexicano. “Hoy es tiempo de mirar hacia adelante”, agrega. Hacia Chile. Por esa razón, regresar a Sudamérica era un punto en su agenda.
“Este reto es muy importante en lo particular, es un torneo que me falta por jugar, me quedé muy cerca la ocasión anterior”, recuerda Marco, quien junto con otros siete jugadores, Jona-
than dos Santos, Javier Cortés, David Cabrera, Israel Jiménez, Néstor Calderón, Néstor Vidrio y Jorge Hernández, fue evidenciado en un video.
Eso es tiempo pasado. El presente habla de dar la campanada, de dejar
el nombre del futbol mexicano lo más alto posible.
“Además, esta es una buena vitrina para todos, van a estar muchas miradas sobre este campeonato”, manifiesta.
—¿Qué tiene este equipo mexicano que lo puede hacer especial a los ojos de Sudamérica?
—La ambición. Hay mucha calidad en estos futbolistas, a pesar de que hay muchas caras nuevas. Se ve, se huele el orgullo que hay en cada uno de nosotros por representar a la Selección Nacional—, contesta Marco Jhonfai.
El Tri está en el grupo A de la competencia, junto con el anfitrión Chile, Ecuador y Bolivia, rivales a los que se les puede hacer un buen juego.
“Son rivales fuertes, no podemos despreciarlos. Son equipos que siempre tienen algo a lo cual aspirar, pero al final nosotros tenemos que pensar primero en lo que podemos ofrecer como equipo y después en lo que mostrará la competencia”, analiza.
—Si te va bien en el torneo, ¿podrías al fin saltar al futbol de Europa?
—Mmm. No es una obsesión irme a Europa. Mi obsesión es hacer buenas actuaciones, lo demás se irá dando”.
En el torneo mexicano que está por finalizar, Fabián firmó con el Guadalajara siete goles y tres asistencias, lo que le alcanzó para ser convocado al Tri. “El llamado me llega en uno de los mejores momentos de mi carrera. Estoy muy satisfecho con lo que hice con mi club. No se logró el objetivo de salir campeones, pero creo que me mantuve en buen nivel”.
—¿Has vuelto a callar bocas? ¿Muchos te han desahuciado en varios momentos de tu carrera?
—Uno siempre tiene que hacer lo mejor dentro de la cancha, es la mejor forma de hablar de un futbolista—, responde el tapatío.
Así, Fabián va a terminar lo que un día empezó hace cuatro años.
“La carrera del futbolista y de todos es así. Uno trabaja para estar arriba, pero a veces también te toca equivocarte, estar abajo. Mas pase lo que pase nunca tienes que dudar de ti mismo”.
Eso, al final, es lo mejor que pudo hacer para levantarse de ese error de hace cuatro años.