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ariel.velazquez@eluniversal.com.mx
En Texas el futbol americano es una religión y Houston es una de sus catedrales. Con los Texans de la NFL, la ciudad espacial presume de ser la única del estado en cerrar el círculo que comienza con las categorías infantiles, pasa por el sistema colegial y termina con el profesional.
Desgraciadamente para Dallas, los Cowboys juegan en Arlington y entrenan en Frisco.
Acudir a un partido de futbol en Houston es tan normal como ir a la iglesia los domingos en esta metrópoli de 2.2 millones de personas. Fue fundada en el siglo XIX por los hermanos Augustus Chapman y John Allen a orillas del río Buffalo Bayou en donde en la actualidad se ubica uno de los parques más grandes de la ciudad, que es utilizado por corredores, ciclistas y residentes que gustan de ejercitarse o esparcirse.
Poco más de 150 años después de su nacimiento, Houston, ubicado en el surestes de Texas, recibirá su tercer Super Bowl, el segundo en el NRG Stadium, que antes era conocido como Reliant. El 21 de mayo de 2013, durante la reunión de ejecutivos y dueños celebrada en Boston, se designó a Houston
como la sede del partido por el trofeo Vince Lombardi.
Desde ese momento comenzaron los preparativos para hacer despegar a Houston. Una inversión de 2 mil millones de dólares fructificó en
el centro de Convenciones George R. Brown , la remodelación del Discovery Green Park y la construcción de la Avenida Houston, bautizada en castellano para honrar al 40 por ciento de la población de origen hispana que vive ahí.
Houston puede presumir de ser la cuarta urbe más grande de Estados Unidos, por detrás de Nueva York, Los Ángeles y Chicago. Su faceta multicultural es uno de los factores que vuelve atractiva a esta comunidad. Se estima que tiene más de un millón de residentes nacidos fuera de Estados Unidos.
Se espera que el Super Bowl LI genere una derrama económica de 350 millones de dólares para Houston, cuya economía se basa en las industrias de la energía, la manufactura, la aeronáutica y la salud. Houston es la sede del internacionalmente conocido Texas Medical Center, que contiene la mayor concentración del mundo de instituciones sanitarias y de investigación.
México es el mercado de turismo más importante para la ciudad, pues registra una gran afluencia para acudir a atenderse en el sector salud de aquel país y acudir de compras.
El Centro Espacial Johnson y la NASA Space Center Houston integran el complejo que desde 1992 permite a los visitantes conocer la carrera que Estados Unidos emprendió al espacio. Se hizo realidad con una inversión de 75 millones de dólares.
De esta forma Houston, que es la ciudad más poblada de Texas, está fuera de toda galaxia con su amor por el espacio y el futbol americano.