El ganador del trofeo Heisman, Rashaan Salaam, se suicidó en medio de una batalla contra la depresión, confirmó el jueves el informe de su autopsia, aunque los investigadores jamás sabrán si el running back sufría de alguna enfermedad cerebral crónica a raíz de jugar fútbol americano porque su familia no aceptó que se realizaran esas pruebas.
Salaam fue hallado muerto el 5 de diciembre en un parque cerca de la Universidad de Colorado, donde fue una estrella entre 1992-94 y se convirtió en uno de los mejores jugadores en la historia del equipo. Tenía 42 años.
Salaam falleció por un disparo a la cabeza, confirmó la autopsia de la oficina del médico forense del condado de Boulder. Los investigadores hallaron una nota en la escena. También mencionaron en el informe que la familia de Salaam indicó que el exjugador tenía historial de depresión y había pasado por situaciones estresantes recientes.
Salaam era musulmán, y el Islam prohíbe que los cuerpos sean contaminados después de la muerte. La familia no permitió al médico forense realizar pruebas que hubiesen revelado si sufría de enfermedades cerebrales crónicas por los golpes a la cabeza que recibió en su época de jugador.
El exrunning back había estado bebiendo alcohol en exceso y fumando marihuana antes de su muerte. El informe señala que su porcentaje de alcohol en la sangre era de 0.25, más del triple del límite legal para manejar.
Salaam ganó el trofeo Heisman al mejor jugador de fútbol americano universitario en 1994, y fue elegido por los Bears de Chicago en la primera ronda del draft de 1995. Acumuló 1.074 yardas por tierra y 10 touchdowns en su primera temporada en la NFL, pero nunca volvió a igualar ese rendimiento y jugó su último partido en 1999 con los Browns de Cleveland.
hgm