Arlington.— Los Cowboys de Dallas (11-2) vieron esfumarse su racha de 11 victorias seguidas al caer ante los Giants de Nueva York, el único equipo que los ha derrotado esta temporada, pero todavía pueden conquistar su división y el primer lugar de la Conferencia Nacional.
La semana pasada, la defensiva de los Giants paró en seco a la poderosa ofensiva de Dallas, que sólo pudo marcar en una ocasión. El duelo terminó 7-10.
Aún con la derrota, el Este de la NFC quedará en manos de los Cowboys si vencen a los Buccaneers de Tampa Bay y los Giants no lo hacen ante los Lions de Detroit, o si empatan y los neoyorquinos pierden. El equipo de la estrella solitaria también tendrá ventaja de cancha local si gana hoy por la noche.
“Cada partido hemos ido mejorando”, dijo Jason Garrett, head coach de los Cowboys durante la semana. “La defensiva ha hecho un gran trabajo permitiendo pocos puntos en los resultados”.
El entrenador se mostró tranquilo, a pesar de la derrota del domingo pasado y aseguró que tienen muy buenas probabilidades de conseguir la victoria en casa. “Tenemos que fijarnos en qué podemos mejorar y hay aspectos necesitamos trabajar para vencer a Tampa”.
Los Buccaneers (8-5) han ganado cinco partidos consecutivos, y la última vez que lograron esa gesta conquistaron el Super Bowl, en 2002.
El QB Jameis Winston ha formado una buena sociedad con el receptor Mike Evans, mientras que Doug Martin promedia 102 yardas desde la línea de ataque en sus 13 últimos partidos como visitante.
Winston, en su segundo año como profesional, suma 3 mil 364 yardas y 23 anotaciones.
La defensa de Tampa Bay intentará contener al estelar dúo de novatos de Dallas, el pasador Dak Prescott y el corredor Ezekiel Elliott.
Los de la Florida buscan la cima de la División Sur de la Nacional.
Actualmente son segundos, pero tienen la misma marca que los Falcons de Atlanta, que lideran el sector, y reciben a unos inofensivos 49ers de San Francisco.
