Colin Kaepernick insistió en su polémica protesta durante el canto del himno estadounidense antes de los partidos de pretemporada de la liga profesional NFL.
Antes del duelo del jueves de su equipo, los San Francisco 49ers, ante los San Diego Chargers, el quarterback se arrodilló mientras un oficial de Marina cantaba el himno nacional y una decena de militares extendían una gran bandera.
Esta vez, el armador de juego no estuvo solo, ya que su compañero Eric Reid también se arrodilló. La acción fue recibida con silbidos y abucheos desde la grada.
El gesto de protesta de Kaepernick fue imitado también por el cornerback de los Seattle Seahawks Jeremy Lane, que no se levantó antes del partido ante los Oakland Raiders durante la ejecución del himno.
Kaepernick, que inició su campaña en partidos anteriores negándose también a levantarse durante los acordes, pretende protestar contra
el racismo en su país, contra la diferencia de trato y contra la violencia policial, dijo a la televisión ESPN tras la victoria de su equipo por 31-21 ante San Diego.
Su actitud causó polémica en Estados Unidos, donde el candidato a presidente Donald Trump sugirió que el jugador debería marcharse.
"Tal vez debería buscarse un país que se adapte mejor a él", dijo en la noche del lunes el candidato republicano en la radio FM-KIRO.
Kaepernick, que ya había calificado a Trump como "abiertamente racista", aseguró que no es "un antiamericano".
