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Las amonestaciones y expulsiones podrían dejar de ser de uso exclusivo del futbol. La NFL discutirá esta semana si a partir de la campaña 2016 aplica una regla similar a la de la doble tarjeta amarilla, que se traduciría en expulsiones a jugadores considerados malintencionados.
Pero, ¿qué castigos ameritarían una “tarjeta amarilla” o amonestación? Bueno, el comité de competencia de la NFL sugiere que sea la “conducta antideportiva”, lo cual, por supuesto, puede extenderse a varias situaciones, como lanzar un puñetazo o golpear con el antebrazo, patear a un oponente e insultar, verbalmente o con gestos o ademanes.
Y no sólo es eso. También podrían ser considerados como una “amonestación” las faltas personales, como sujetar de la barra para realizar un tacleo, golpear al quarterback fuera de tiempo y golpear con el casco o en la zona de la cabeza o cuello.
Algunos la han llamado la “Regla Odell Beckham Jr.”, luego de aquel juego del 20 de diciembre en el que el receptor de los Giants entabló una feroz y sucia batalla personal con Josh Norman, cornerback de Carolina.
Beckham Jr. fue castigado en tres ocasiones por rudeza innecesaria. Si la nueva regla se aprueba, después del segundo pañuelo el jugador se va a las regaderas.
Por supuesto, al igual en el que futbol, los árbitros podrían determinar que una falta flagrante amerita expulsión automática, incluso sin la necesidad de una amonestación previa.
La regla aún no se aprueba y ya ha causado polémica.
“Creo que es algo tonto. Es algo que diría alguien que jamás ha jugado”, dijo Richard Sherman, cornerback estelar de Seattle, a ESPN. “[Roger Goodell, comisionado de la NFL] es sólo una cara, un traje, que nunca ha entrado al campo de juego para comprender cómo te ganas un foul personal”.
Clarificar la regla de la recepción es otro gran pendiente de la NFL, pero tal parece que la liga no tiene ese tema en la agenda de la semana, según un reporte de NFL Network.
No entiendo cómo es posible que a la NFL no le interese ser más preciso en su regla más confusa y -quizá- más importante: ¡la que determina cuándo es válida o no una recepción!
El gran problema de esa regla es el fraseo en lo que se refiere a la posesión del balón.
En ese respecto, el libro de reglas de la NFL dice: “Un jugador tiene posesión cuando está dentro del campo y tiene firme agarre y control del balón con las manos o los brazos”.
Y luego dice que “es una recepción, si en el proceso de intentar atrapar el balón, el jugador asegura el control del balón antes de que toque el suelo, y que el control se mantiene durante y después de que el balón haya tocado el suelo”.
La primera imagen que viene a la mente es aquella no-recepción de Dez Bryant en los Playoffs ante Green Bay. Cuando el receptor de los Cowboys cae y hace contacto con el césped, la punta del balón se mueve.
Es que el jugador “debe mantener el control del balón hasta después de hacer contacto con el suelo, ya sea en el terreno de juego o en la zona de anotación. Si se pierde el control del balón, y el balón toca el suelo antes de que [el jugador] recupere el control, no hay posesión. Si se recupera el control antes de que el balón toque el suelo, entonces es una recepción o intercepción [válida]”.
La NFL anunció hace algunos meses que crearía un comité con ex receptores para determinar o en su caso clarificar cuándo una recepción es válida o no.
Mientras tanto, Dean Blandino, el jefe de oficiales de la NFL, trata desesperadamente todas las semanas de explicar qué es una recepción.
Que alguien le ayude.