Minneapolis.— Los Vikings de Minnesota son el anfitrión de un juego de Playoffs por primera vez en seis años. Y es un reto.
Frente a ellos están los Seahawks de Seattle, bicampeones de la Conferencia Nacional (NFC), que le propinaron a los Vikings su peor derrota de la campaña.
Los Seahawks llegan tras ganar ocho de sus últimos 10 partidos de temporada regular.
Seattle no contará con la presencia de Marshawn Lynch —corredor que en seis de 10 partidos de postemporada tuvo más de 100 yardas— quien se recupera de una operación de hernia.
En temporada regular, Seahawks se impuso a Minnesota 38-7, en un duelo en el que sólo le concedieron 18 yardas al campeón corredor de la NFL, Adrian Peterson.
La defensiva de Seattle sólo permitió un promedio de 11 puntos y 218.8 yardas totales en los últimos cinco duelos.
Minnesota no está indefenso. La clave será Peterson. Vikings tiene marca de 10-0 cuando corre para más de 113 yardas y 1-5 cuando no cubre dicha cuota.
El conjunto púrpura tiene en los controles al quarterback de segundo año Teddy Bridgewater, mientras que Seahawks cuenta con Russell Wilson, quien ya tiene un anillo de Super Bowl. La experiencia de Sea-ttle en postemporada será factor de peso.