Nueva York.— La leyenda de Tony Romo sigue creciendo a pesar de que él no está en el campo. Y es que los Cowboys de Dallas sumaron su cuarta derrota en fila al caer de visitantes 20-27 con los Giants de Nueva York.
Después de tener una semana de descanso, Matt Cassel, quien llegó a Dallas después de la lesión de Romo, tomó las riendas de la ofensiva, pero en lugar de ser un revulsivo, resultó contraproducente al sufrir tres intercepciones, dos de ellas de Dominique Rodgers-Cromartie, quien devolvió una hasta las diagonales.
Los equipos especiales también fueron determinantes para el conjunto de la Gran Manzana. Después de que los ‘Boys’ empataron la pizarra 20-20, Dwayne Harris delvovió 100 yardas la patada de kickoff, ante sus ex compañeros.
Dallas continúa en un tobogán que inició cuando sus estrellas Tony Romo y Dez Bryant se lesionaron. Ayer, el corredor Darren McFadeen, cargó con la responsabilidad de jalar la carroza de los Cowboys y terminó el día con 152 yardas y una anotación.
Por su parte, Eli Manning culminó la tarde con 13 de sus 24 pases lanzados, para 170 yardas y ninguna anotación ni intercepción. Rueben Randle fue quien más yardas atrapó con 64.
El ataque terrestre de los Giants sumó 132 yardas.
Así, queda en evidencia que Dallas extraña mucho a Romo.