Pittsburgh.— A pesar de que Ben Roethlisberger comienza a dar señales de mejoría, los Steelers de Pittsburgh están listos para afrontar un partido más sin su quarterback titular. Se enfrentarán a los Cardinals de Arizona, que también lidian con las lesiones.
Steelers busca su segundo triunfo con Michael Vick en los controles. Tras una dolorosa derrota 23-20 ante Baltimore, Pittsburgh respiró tras imponerse 24-20 a San Diego el lunes pasado.
Los Steelers continúan en la lucha por el título de la División Norte de la Conferencia Americana, donde manda Cincinnati con marca de 5-0. El conjunto oro y negro espera mejorar con el regreso de ‘Big Ben’, ya que de ser el tercer mejor equipo en yardas por pase (298.7) con él en el campo, se desplomó y ahora es el segundo peor, con promedio de 162.3 por partido.
El regreso eventual de Roethlisberger le ayudará mucho al receptor Antonio Brown, quien era segundo de la Liga con 436 yardas totales, pero en las últimas dos semanas sólo lleva 87.
Martavis Bryant también estará de regreso tras cumplir cuatro semanas de suspensión por violar la política de consumo de sustancias no permitidas por la NFL, además de estar ausente el duelo del lunes debido a una lesión en la rodilla.
Bryant atrapó 26 pases la temporada pasada para 549 yardas y logró ocho anotaciones.
Arizona tendrá a tres elementos en la banca también por lesión. Se trata de Chris Clemons y Kenny Demens, quienes son parte de los equipos especiales, además del linebacker Alex Okafor, quien estará ausente cuatro semanas debido a un tirón en la pantorrilla.
Okafor es el mejor defensivo para presionar a los quarterbacks. Fue el líder del equipo con ocho capturas la temporada pasada y esta campaña registra dos.
Para ayudar a subsanar la ausencia de Okafor, Arizona contrató a Dwight Freeney en la agencia libre. Freeney fue uno de los mejores alas defensivas de la NFL cuando estuvo con los Colts (2002-2012), pero no logró conseguir doble dígito en capturas desde 2010 y sólo logró 3.5 el año pasado con San Diego.
El coach Bruce Arians piensa que Freeney encajará bien en su defensiva y que podrá contribuir.
“Sabe presionar a los pasadores. Eso es algo que no le vamos a enseñar”, opinó el entrenador.
Cardinals, que perdió cuatro de sus últimos cinco compromisos ante Pittsburgh, incluido el 27-23 en el Super Bowl XLIII, espera que su ofensiva —la que anota más en la Liga— pueda compensar el resto de sus deficiencias.
Arizona tiene un promedio de 38 puntos por partido y se repuso de la derrota 24-22 contra San Luis para después imponerse 42-15 ante Detroit la semana pasada.
Carson Palmer (13 touchdowns y tres intercepciones), Larry Fitzgerald (490 yardas por recepción y seis touchdowns) y Chris Johnson (405 yardas terrestres) son los jugadores veteranos que conducen el destino de los Cardinals, que lucen como serios candidatos para llegar a la postemporada.