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Saúl Álvarez subirá al ring del T-Mobile Arena, en Las Vegas, para callar a Julio César Chávez Junior.
“Es alguien que habla mucho, no sostiene lo que dice... no es coherente”, comentó “Canelo” sobre su rival, al mediodía de ayer.
El tapatío está harto de las palabras que salen de la boca del hijo de la “Leyenda”, siempre muy presente en redes sociales.
JC Junior utiliza las plataformas digitales para subir fotos y videos de trabajo dentro y fuera del gimnasio, previo al esperado enfrentamiento entre ambos. Álvarez ha sido más reservado en este tiempo de preparación, mientras que JC recibe diversos mensajes de apoyo.
“Él tiene fans por su papá, no por sus logros. Como muchos, respeto a la ‘Leyenda’. [Junior] ha tenido mucho altibajos, no es un ejemplo para los niños”, continuó. “Mis seguidores han estado conmigo desde el principio. Ellos me ayudaron a llegar hasta aquí”.
A finales de marzo, durante un entrenamiento, Chávez hijo tuvo una sorpresa: examen antidopaje. En ese entonces, JC hijo declaró que ‘Canelo’ tiene miedo”, una clara referencia a que el grupo del tapatío había mandado la sorpresa.
“Son puras pend... Patadas de ahogado. Él ya salió positivo y yo nunca”, explotó Álvarez. “Siempre he sido limpio. Cómo tiene cara para decir esas estupideces”.
Hace una década, los caminos de los dos pugilistas se cruzaron y desde ese entonces siempre ha existido un roce entre ellos. “En ese tiempo, la familia Chávez tenía todo el poder en Guadalajara y, cuando comencé a pelear, nació la rivalidad”, platicó en teleconferencia.
A pesar de todo, “Canelo” no demeritó el trabajo que ha hecho el sinaloense, quien se ha esforzado mucho para el combate. “Me alegra que esté bien y que se ponga en buena forma. Hará una mejor pelea”.
Sin embargo, para Álvarez, toda la energía que invierta Julio César será inútil. “Soy el favorito”, atajó. “Por la disciplina y mi talento. Los conocedores saben mis habilidades y que soy mejor que él”.
El boxeador prevé que el duelo se definirá por nocaut, pues los estilos de ambos no permitirán que la pelea duré los 12 asaltos.
“No es una pelea por un título, es más por orgullo. Para la gente es interesante por eso. Vamos por más que un cinturón”.
