En un video difundido en la cuenta de Twitter de la promotora Zanfer, que trabaja con Julio César Chávez Junior, se escucha al “Hijo de la Leyenda” hablar con franqueza y confianza, tal vez demasiada, sobre su pelea del 6 de mayo ante Saúl “Canelo” Álvarez. Asegura que lo va a noquear en el octavo asalto. En la charla, que parece informal, también dice que vendrá a entrenar 80 días al Centro Ceremonial Otomí. Todavía con aliento entrecortado, pues venía bajando del ring, Chávez menciona que lo más seguro es que la pelea sea en Las Vegas, pero se deslinda, pues asegura que “ellos tienen todas las cláusulas”. Sobre las razones por las que se tardó en concretarse la contienda, acepta que subió de peso y se aburrió de los guantes tras la derrota ante Sergio “Maravilla” Martínez.
Susto para Shanahan
Kyle Shanahan, coordinador ofensivo de los Falcons de Atlanta, pasó momentos de terror cuando en la noche del lunes no encontraba su maleta. Su principal temor era que el libro de jugadas pudiera caer en manos de los Patriots de Nueva Inglaterra. Durante su comparecencia ante los medios en el Opening Night, la maleta de Shanahan fue tomada por error por un columnista de un periódico de San Francisco. Además del playbook, en el interior se encontraban boletos para el Super Bowl y artículos personales del entrenador que la próxima temporada podría tomar las riendas de los 49ers de San Francisco. Por suerte, la mochila fue devuelta con todas sus pertenencias. Muchos ya pensaban que era otra de las travesuras de Bill Belichick, coach de Nueva Inglaterra.
Oribe y Moi no pudieron ir al Tri
Pese a que lleva algunas piezas importantes como Hirving Lozano y Giovani dos Santos, Juan Carlos Osorio no convocó a todos los jugadores que planeaba para el amistoso del próximo miércoles ante Islandia. Hay dos nombres que estaban en su mente y no se los facilitaron: Moisés Muñoz y Oribe Peralta. La razón es que un día antes del juego del Tricolor, los Jaguares y el América disputarán su partido pendiente de la primera jornada. Ambos clubes se juegan mucho y no soltaron a sus piezas clave. Para los de Coapa urge salir de los últimos puestos y los selváticos tratan de conservar el buen momento para ver si surge algún comprador interesado, con eso de que están a la venta por aquello de la multipropiedad.