ariel.velazquez@eluniversal.com.mx
Cuatro años bastaron desde su debut profesional para que Irene Aldana alcanzara la UFC. La peleadora sinaloense se presentará mañana en la empresa más importante de artes marciales mixtas, cuando enfrente a Leslie Smith en Sacramento, California.
La mexicana llega con un récord de 7-2-0, y luego de haber perdido su pelea por el título de Invicta FC ante Tonya Evinger.
“He sacrificado mucho para poder llegar a UFC. Estoy muy motivada por la oportunidad que me da la empresa y lista para arrancar con un triunfo”, sostuvo Aldana, quien se adentró en el terreno de paga el 17 de octubre de 2012 en Guadalara.
Varias celebraciones familiares y con amigos son las que Irene se ha perdido al convertirse en peleadora profesional, pero ninguna le dolió tanto como la Navidad de 2013, cuando tuvo que festejar la fecha en un avión procedente de Brasil, mientras en casa todos estaban reunidos.
“Tengo una familia muy grande y para mí Navidad es una fecha muy especial porque me junto con todos mis primos, tíos y amigos. Ese año no pude estar presente porque venía de pelear en Brasil”, sostuvo la culichi.
Una noche triste para la mexicana, pues el regreso se hizo más pesado con su primera derrota como profesional.
“Todo lo que he vivido sirvió para llegar a donde estoy ahora. Cada entrenamiento y sacrificio me hicieron más fuerte y ahora tengo que aprovechar eso para ser protagonista en mi división [gallo]”, externó la amiga y compañera de entrenamiento de Alexa Grasso.
Con 28 años de edad, Irene tuvo la oportunidad de estudiar diseño industrial, una actividad que ahora logra integrar en su carrera como peleadora, al encargarse del bosquejo de su vestuario.
“Me gusta darle un toque a mi ropa y gracias a mi carrera puedo hacerlo bien y eso me da gusto”, finalizó.
