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alejandro.rodriguezd@eluniversal.com.mx
La fecha límite son dos meses. Ese es el plazo que se ha puesto el boxeador Juan Manuel Márquez para decidir si regresará o no al ring tras un año sin sostener alguna pelea.
Su problema es la rodilla derecha que se le inflama cada vez que realiza alguna actividad física desde hace ya varios meses.
“Me quiero dar de plazo dos meses. Ya empecé a entrenar, como el pasado sábado que me fui a correr 10 kilómetros al Nevado de Toluca y no hubo molestia. Ahora quiero hacer el entrenamiento fuerte de tres horas en las mañanas con sesión en la tarde, como si fuera a pelear, y así sentirme. Si respondemos bien, vamos a ver a Juan Manuel Márquez de vuelta al ring”, explica el boxeador capitalino.
Márquez, quien ayer estuvo presente en el programa radiofónico Hola Familia de Grupo Fórmula, tiene varias opciones de regresar al ring.
Por un lado su nombre se maneja para enfrentar al británico Kell Brook, así también como posible rival del estadounidense Floyd Mayweather Jr. y hasta para una pelea en el zócalo de la ciudad de México. Sin embargo, ‘Dinamita’ pide paciencia para saber la evolución de su lesión.
“Están manejando muchas cosas pero no hay nada firme porque no me he sentido bien de mi rodilla. Es importante también ver cómo responde mi cuerpo a una rutina porque si no me puedo ni levantar a correr a las cuatro de la mañana por dolor de cuerpo del día anterior, ya no tiene caso. El ojo del tigre sigue ahí”, advierte.
Uno de los motivos para alargar su retiro del boxeo profesional se debe a que no quiere retirarse con un descalabro. Su orgullo de peleador le impiden tener un colofón así para el considerado la última leyenda del boxeo mexicano.
“Me quiero poner al cien por ciento porque no quiero arriesgar nada. No me quiero retirar con una derrota. Para mi sería malísimo. Primero hay que valorar mi condición. Si me siento bien, seguiré. Si no me siente bien, para que arriesgar la salud y todo lo que se ha construido. Para qué dejarlo caer. Mejor seguir siendo ejemplo para toda la gente”, dice el peleador de 41 años.
Para ‘Dinamita’ tiene un gran peso el mantenerse como referente dentro y fuera del deporte. Por ello, cuida hasta el último detalle de sus decisiones.
“Que me vean como una figura de triunfo es algo padre, pero también es una posición muy difícil porque te toman como ejemplo. Tienes una gran responsabilidad en la cual tienes que aprender a sobreponerte y siempre buscar el mostrar el lado bueno, porque uno también tiene el lado malo, el lado de coraje y enfado, pero, por la gente que te sigue, debes de mostrar siempre lo bueno”, dice Juan Manuel.
Durante el programa radiofónico, el boxeador capitalino recibió la sorpresa de escuchar varias voces de su familia, compañeros de profesión y amigos que lo reconocieron como un gran ejemplo por su dedicación al boxeo. Las palabras de su hijo mayor fueron las que lo doblegaron con algunas lágrimas y la voz quebrada.
