Desde la gerencia y banca de los Dodgers de Los Ángeles se ha dado un cambio de filosofía para encarar la próxima temporada. Y es que en la novena angelina prefieren nutrir su bullpen y dejar de lado el monstruo de tres cabezas que tenían.
Los Dodgers consiguieron al cerrador cubano Aroldis Chapman, quien llegó procedente de los Reds de Cincinnati. El conjunto californiano también negoció a Hisashi Iwakuma y durante las actuales reuniones invernales, se encuentran en pláticas del abridor José Fernández de los Marlins de Miami.
Iwakuma, de 34 años, habría aceptado mudarse a Chavez Ravine por tres años y 45 millones de dólares. El derecho tuvo marca de 47-25 y efectividad de 3.17 en cuatro temporadas con los Mariners de Seattle, tras pasar 11 años con los Búfalos de Kintetsu de Japón.
Chapman, un zurdo que regularmente lanza la recta por encima de las 100 millas por hora, tiene efectividad de 2.17, 146 salvamentos y 15.4 ponches por cada nueve entradas en seis años con Cincinnati.
Con la suma de Chapman, los Dodgers han conformado una de las mejores duplas de zurdo y derecho para culminar los encuentros ya que Kenley Jansen, quien rescató 80 juegos la temporada pasada, se mantendría con Los Ángeles.
Durante las primeras horas de la apertura de las reuniones invernales, se informó que los Marlins se encontraban escuchando ofertas por el ‘El Fenómeno’ Fernández, en especial con los Dodgers.
Yahoosports.com reportó que los Marlins arrancaron dichas conversaciones pidiendo a los cotizados prospectos Corey Seager, el torpedero y antesalista que bateó .337 en 27 juegos el año pasado, en su primera experiencia en las ligas mayores, y el zurdo mexicano Julio Urías, quien es considerado el próximo Fernando Valenzuela de los Dodgers.
Fernández es un as y probable abridor uno o dos en cualquier rotación de las Grandes Ligas y apenas tiene 23 años de edad, pero Seager y Urías podría ser un costo demasiado alto por sus servicios o bajo para otros, ya que Fernández es incentivo inmediato, mientras que Seager y Urías son tomados en cuenta para el futuro.
Lo que es una realidad es que el agente de Fernández, Scott Boras ha roto su relación con los Marlins, situación que empuja a Fernández y a la organización de la Liga Nacional, ha escuchar varias ofertas.
De esta forma los Dodgers construyen una nueva estrategia para llegar a la Serie Mundial, la cual año con año es una obligación por la nómina que pagan.