Arlington.— Felices 162 para 10 equipos de Grandes Ligas que alcanzaron la postemporada y tristes 162 para el resto de las 20 franquicias que tendrán que esperar hasta la primavera para volver a jugar.

La maratónica temporada de 162 juegos ha terminado y con la coronación de los Rangers de Texas en el Oeste de la Americana quedaron definidos los duelos de comodín que dan comienzo a los Playoffs.

Los Rangers derrotaron 9-2 a los Angels para obtener el banderín de su división y con ello también definieron que los Astros sean el equipo que viaje a Nueva York para enfrentar mañana a los Yankees en un encuentro a matar o morir.

Un año después de liderar su circuito con 95 derrotas, dos meses tras estar rezagados ocho juegos de la cima y tres días luego de asegurar un boleto a la postemporada, los Rangers celebraron su sexto título de división. Texas abrirá su primera serie de división desde 2011 el jueves frente a los Blue Jays de Toronto.

Los Angelinos necesitaban ganar su último partido y que Houston perdieran en Arizona para obligar un desempate por el segundo comodín de la Americana. Los Astros perdieron 5-3 ante los Diamondbacks, pero su pase a la postemporada se certificó cuando los Angelinos sucumbieron.

Mientras que los Astros no estaban en postemporada desde 2005. Con la derrota ante Arizona dejaron ir la localía contra Yankees que regresa a Playoffs desde 2012 cuando fueron barridos por los Tigers de Detroit en la Serie de Campeonato de la Americana.

Los Royals de Kansas City terminaron con el mejor récord (95-67) y esperan al ganador del comodín para iniciar su compromiso.

En la Nacional los Cubs de Chicago con su as Jake Arrieta, quien terminó como el pitcher con más victorias en la campaña (22), viajan a Pittsburgh para medirse con los Pirates que contarán en la loma con Gerrit Cole.

El ganador visitará a partir del viernes a los Cardinals de San Luis, conjunto que terminó con 100 victorias y es el favorito para conquistar el viejo circuito.

Los Dodgers de Los Ángeles serán locales ante los Mets de Nueva York. Zack Greinke terminó como el pitcher con menor efectividad de toda la gran carpa (1.66).

Mientras que el venezolano Miguel Cabrera obtuvo su cuarto campeonato de bateo de la Americana (.338). Chris Davis fue el rey de cuadrangulares con 45. 

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