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Por temor a la propagación del Chikungunya, el estadio Olímpico de Honduras fue fumigado.
Acción que se realizó para que el mosquito que propaga la enfermedad no contagie a los asistentes del duelo entre México y los catrachos.
Se espera que los 37 mil asientos del recinto centroamericano se ocupen para el juego correspondiente a la segunda fecha de la eliminatoria mundialista rumbo a Rusia 2018.
A tres horas del arranque del encuentro, los fans locales comienzan a ingresar al estadio.
