El 7 de julio del año pasado se anunció la salida de una de las cabezas de diseño de la firma Valentino: Maria Grazia Chiuri abandonaba su puesto para tomar la dirección creativa de Dior. Si bien las dudas sobre su fichaje no tardaron en surgir, la incertidumbre marcaba el futuro de la casa italiana: ¿podría Pierpaolo Piccioli (la otra cabeza de Valentino) mantener el éxito sin su eterna cómplice? Egresado del Istituto Europeo di Design de Roma, conoció a Chiuri a principios de los ochenta. Sus primeros años en la industria transcurrieron en un taller, hasta que, en 1990, la creadora lo llamó para sumarse a su equipo en el área de accesorios de la marca Fendi. Ahí, él descubrió las técnicas de trabajo artesanal que caracterizan el afamado Made in Italy.
En 1999 fueron contactados por el propio Valentino Garavani para dar impulso a la línea de complementos de la firma. Los diseñadores ascendieron en 2008 al puesto de directores creativos luego del retiro de su fundador y de una corta y muy desafortunada estancia de Alessandra Facchinetti.
Haber trabajado mano a mano con Valentino ayudó a que entendieran con precisión la marca. Su sensibilidad y el respeto a los archivos de la casa, aunado a una poderosa visión comercial, no solo les valió el aplauso del propio diseñador, sino también la aceptación de clientes en todo el mundo: la firma reportó ganancias por más de mil millones de dólares durante 2015, un 48 por ciento más que en 2014.
Por buen camino
La colección primavera-verano 2017, debut en solitario de Piccioli, recibió críticas positivas por su encantadora elegancia, impecable construcción y acostumbrada esencia romántica. “Cuando planeaba esta entrega, sentí la necesidad de hacer una muestra más humana y personal”, dijo.
Hace unos días, el creador volvió a echarse a la bolsa a los críticos de moda con la antología pre-fall 2017, mostrada en Nueva York. Los estampados florales, los bordados de pedrería, las cascadas de holanes, los cuellos franceses y la fusión de seda con pelo natural se convirtieron en protagonistas de esta entrega, la cual está inspirada en la esperanza y el optimismo, en sintonía con los tiempos de incertidumbre que se viven. “Una América en la que todos sueñan: la esperanza en la mente y en el cuerpo”, fue la idea central sobre la que desarrolló los atuendos presentados.
Piccioli ha demostrado gran talento y capacidad para llevar la firma por buen rumbo y hacia nuevos horizontes; no obstante, el éxito no está comprado en la industria de la moda, donde el juego de las sillas está a la orden del día.
“Durante mi adolescencia soñaba con convertirme en director de cine. Entonces descubrí la moda y su poder narrativo, y tomé la decisión de ser diseñador. Para mí, fue la evolución natural de un sueño.”
PIERPAOLO PICCIOLI
DIRECTOR CREATIVO DE VALENTINO