Tras meses de especulaciones, el diseñador belga Raf Simons fue nombrado chief creative officer de Calvin Klein como parte de una estrategia para transformar la identidad de la casa. Lo anterior se confirmó en FashionMag.com y Women’s Wear Daily, ambas publicaciones especializadas en los aspectos empresariales y financieros en la industria de la moda contemporánea.
Esta noticia ratifica una serie de rumores y movimientos que han sacudido a la casa estadounidense desde abril, mes en el que se unificaron todas las divisiones de la casa bajo un mismo concepto creativo y despidieron a los dos directores creativos de la marca: Italo Zucchelli (línea masculina) y Francisco Costa (Calvin Klein Collection, división de lujo de moda femenina).
Desde su fundación en 1968, la firma destacó por sus piezas minimalistas y por conquistar mercados a los que otros diseñadores se resistieron en un principio de su carrera: jeans, calzado, ropa interior —¿quién no recuerda las campañas con Mark Wahlberg en los 90?—, relojes, blancos y aromas unisex. Con el retiro de Klein y la venta al grupo PVH en 2002 la estrategia continuó, pero enfrentó una competencia cada vez más feroz, el surgimiento de las marcas de fast fashion, así como ventas bajas en la división de lujo.
La experiencia de Raf Simons con el minimalismo y las presiones corporativas lo convierten en el diseñador ideal para la firma: dirigió Jil Sander entre 2005 y 2012 y durante tres años estuvo al frente de Dior. Sus colecciones dividieron a los críticos de moda, pero sus piezas y accesorios con inspiración retro y toques deportivos fueron un éxito de ventas. Sin embargo, Simons afirmó en una entrevista posterior que el ritmo acelerado de la firma fue demasiado para él.
El belga tampoco es ajeno al mercado masivo, pues ha creado líneas exitosas para Adidas y algunas prendas de su propia firma tienen un precio moderado. El debut del creativo será durante la temporada otoño-invierno 2017 y las expectativas para la casa son más altas que nunca.