Abres los ojos, te levantas, vas al gimnasio, llegas a la oficina, corres a una junta, sales a una cena y cuando llegas a casa te das cuenta de que no tendrás más de cinco horas para dormir. La nueva Énergie de vie, de Lancôme se enfoca en mujeres de entre 25 y 35 años que tienen un ritmo de vida acelerado y poco tiempo para cuidar su piel.
No hay que engañarnos. El hecho de que la piel se regenere durante la juventud no quiere decir que los años no pasarán factura después. Los especialistas coinciden: la piel debe de cuidarse desde la edad más temprana posible, ya que la exposición al sol, la falta de sueño y la mala hidratación derivan en resequedad, manchas y líneas de expresión que con el tiempo son difíciles de combatir. Por ello, Énergie de vie se preocupa por combatir el agotamiento, el estrés, el cansancio y otros efectos de la urbanización.
Esta nueva línea se inspira en el cuidado de piel de las mujeres orientales, que tienen el mejor cutis del mundo. Sin embargo, el reto de Lancôme fue desarrollar pocos productos que fueran tan efectivos como un ejército de diez o más hidratantes y limpiadores especializados. El resultado fue un ritual de tres pasos que concentra nutrientes, antioxidantes y energizantes para la piel.
Todo inicia con Pearly Lotion, un tónico con perlas que nutren y refrescan el cutis al instante y debe aplicarse después de la limpieza diaria. Posteriormente, hay que seguir con Liquid Care, un tratamiento “todo en uno” que concentra lo mejor de un suero y una crema hidratante de la marca. Por último, está la Sleeping Mask, que ayuda a reforzar la barrera natural de la piel y a preservar su nivel de hidratación ideal.
Lo mejor de los productos es que se pueden aplicar dos veces al día de manera fácil y rápida, son aptos para todo tipo de cutis y poseen fórmulas que penetran al instante en la piel. Nuestro
producto favorito es la mascarilla: puedes aplicarla y retirarla o dormir con ella después de un día difícil y tu cara amanecerá renovada y sin señales de deshidratación.