El 20 de octubre de 2014, una era de la moda concluyó con la muerte de Oscar de la Renta. El creativo dominicano logró convertir su nombre en sinónimo de elegancia y, luego de cinco exitosas décadas en la moda, dejó como sucesor de su imperio al inglés Peter Copping, quien hace unos días presentó su renuncia.
El plan original del diseñador era entrenar a Copping, quien durante cinco años fue director creativo de Nina Ricci, y hacer una transición lenta, pero su fallecimiento frustró ese plan. “Nunca tuve la oportunidad de trabajar de manera directa con Óscar, y es algo que lamento profundamente”, expresó al presentar su colección debut para la casa estadounidense.
Aunque las comparaciones no se hicieron esperar, la colección fue bien recibida por la prensa especializada pero las ocho restantes que creó para la casa tuvieron apreciaciones mixtas. Sin embargo, una de las principales ventajas del creativo fue la voluntad de diseñar piezas clásicas con toques de color. “Copping fue muy astuto y conservó las siluetas que remitieron a los años dorados de Oscar, pero innovó con materiales del siglo XXI”, dijo la crítica de moda Suzy Menkes en su reseña de la colección otoño-invierno 2016.
De acuerdo con las declaraciones de Copping, el motivo de su salida obedece a motivos estrictamente personales. Sin embargo, medios como Women’s Wear Daily señalan que durante este periodo, las colecciones no alcanzaron el éxito comercial que tuvieron durante la vida de Oscar.
No se ha revelado de manera oficial una lista de diseñadores que puedan tomar el puesto de Copping, pero en el centro de la especulación se encuentran Laura Kim y Fernando Garcia, quienes abandonaron la marca tras el fichaje del inglés. El año pasado lanzaron Monse, una firma con toques conceptuales que en tan sólo dos temporadas ha conquistado las críticas y los armarios de Selena Gomez y Sarah Jessica Parker.
Por el momento, el estudio de la casa realizará las siguientes colecciones.
