El viernes pasado viajé a la Riviera Nayarit y pasé unos días en el Hotel Grand Velas, donde Santos llevó a cabo la presentación de su línea Crucero 2017, una colección con tintes náuticos, aterrizada y usable en el día a día. Horas antes del desfile tuve el gusto de platicar con él, y en medio de esa charla tan amena pudimos intercambiar puntos de vista y panoramas de la escena nacional e internacional. Yo le tengo un gran respeto a Benito. De hecho, he contado con su apoyo a lo largo del tiempo y él ha confiado en mi trabajo y yo en el suyo. Alguna vez, por ejemplo, trabajamos con Ángela Vazquez, vocalista de Los Vazquez Sounds, y Benito fue el encargado de diseñar el vestido que llevaría Angie a la entrega del Grammy Latino, cuando fue nominada junto con sus hermanos en la categoría de Mejor Artista Nuevo. Por mi parte, yo estuve a cargo del estilismo del trío y nadie mejor que Santos para ser mi cómplice. En resumen, ya llevamos varias historias (entre editoriales de moda y alfombras rojas) y ¡siempre es un deleite recordar todas nuestras aventuras!
El éxito de Benito no es casualidad. Es un hombre sumamente trabajador, apasionado, inteligente y que tiene una estructura clara de negocio; un modelo y un planteamiento que hacen de su marca una empresa rentable y que ha desarrollado con determinación. Al respecto, dice: “¡Ya somos más de 35 empleados!” y entre risas confiesa que no sabe cómo lo aguantan porque trabajan mucho, pero que quizá aman lo que hacen tanto como él.
Pronto Benito presentará el resto de su colección en Finlandia, a donde viajará en las próximas semanas. En lo personal, me de mucho gusto que la voz de un diseñador mexicano logre traspasar fronteras y trascender. Para muestra, aquel vestido rojo que portó Ximena Navarrete al coronarse como Miss Universo 2010 (aunque no fue la única ocasión en que Ximena trabajó con Benito). De hecho, ella es el rostro de las campañas del diseñador jalisciense.
Y vaya que ha tenido éxito entre las mujeres: hoy día muchas mexicanas y extranjeras mueren por casarse en un vestido suyo. Sus diseños femeninos y glamurosos lo han convertido en uno de los favoritos de las celebridades. “Las mujeres confían en mí en uno de los días más importantes de su vida y eso es invaluable”, dice el diseñador. Firme a sus convicciones, Benito sabe los sacrificios que conllevan tener una marca consolidada. “Todo se logra trabajando cada día más y mejor. No hay otra receta”. No podría estar más de acuerdo con él.
Con cariño, Gina.
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