Además de ser el epicentro de la moda italiana, hace varios años que Milán alberga a una serie de firmas que, tanto separadas como colectivamente, tienen una gran influencia en el vestir masculino. Y aunque es raro que se presenten dos colecciones inspiradas en el mismo tema, lo cierto es que muchas de las propuestas, como las que se mostraron en la más reciente edición, tienen uno o varios puntos en común.
Podría parecer imposible tomar el pulso de las tendencias italianas, pero para la temporada Otoño/Invierno 2016 serán notorias tres influencias: el streetwear, los toques retro y la inspiración en las pijamas, misma que también ha estado presente en algunas colecciones femeninas.
Dentro de la primera, destaca la colección de Z Zegna, misma que, con sus influencias alpinas, combinó chamarras acolchadas con piezas de sastrería tradicional, algunas con bordados que recordaban a ramas y hojas de árboles bordadas. En tanto, Calvin Klein también incluyó parkas y anoraks en una colección minimalista adornada por fajines o abrigos de lamé dorado.
La influencia retro, por su parte, se vio durante esta temporada en un espectro más amplio. En Roberto Cavalli, por ejemplo, fue notable la inspiración en el los años 60 y 70, mismos que resurgieron a través de prendas como blazers multicolor en piel de serpiente. En tanto, las siluetas presentadas por Tomas Maier en Bottega Veneta se alejaron de la tendencia skinny para acercarse, más bien al Wall Street de los 80, mientras que Giorgio Armani tomó este periodo en la historia como referencia para los cortes de sus piezas, pero incluyó prendas y materiales de inspiración folclórica como ponchos y abrigos de pelo.
Finalmente, el pajama dressing, aunque con menos probabilidades de convertirse en una tendencia masiva, también estuvo presente colecciones como la de Cavalli, Gucci e incluso Prada, aunque dicha tendencia fue mezclada con outfits de inspiración marinera e ilustrados por el artista visual Christophe Chemin.