“La clave para triunfar en el modelaje es no ser perfecta”, declaró alguna vez el “káiser” de la moda, Karl Lagerfeld, y Lindsey Wixson ha convertido esas palabras en su mantra. Mientras a otras chicas desempeñarse en el oficio les produce inseguridades, a ella le ha ayudado de modo significativo a aceptar sus ‘imperfecciones’.

La joven estadounidense no sólo recuerda a sus compañeros de colegio señalarla por rara, también tiene presentes los rechazos que sufrió cuando iba de agencia en agencia mostrando su book. Fue la firma Marilyn la que vio en su exótica belleza (labios de geisha, pómulos pronunciados y dientes separados) una oportunidad de éxito.

Tan sólo unas semanas después de su fichaje, Wixson fue retratada por Steven Meisel para la portada de Vogue Italia. Ese mismo año, en 2009, abrió el desfile de Prada, en Milán, y cerró el de Miu Miu, en París. Su consagración vino con la campaña Primavera/Verano 2010 de esta última marca.

Después le llovieron contratos para convertirse en imagen de Jill Stuart, John Galliano, Versace, Just Cavalli y Mulberry, además de que lució sobre la pasarela diseños de casas como Dior, Jean Paul Gaultier, Moschino, Oscar de la Renta y Saint Laurent, entre otros más. Había nacido una top.

Hey, muñeca… Quien en un principio le dio aliento para aceptar su apariencia, más tarde se convirtió en su protector. Karl Lagerfeld la ha hecho su incondicional en los desfiles de la maison, incluso la ha seleccionado para lucir sus creaciones de novia. Junto a la alemana Anna Ewers, Wixson es imagen de la campaña Otoño/Invierno 2015 de la firma.

Recientemente, la joven proveniente de Kansas, Estados Unidos, quedó inmortalizada mediante una muñeca impresa en 3D, la cual mide 51 centímetros y será vendida en una serie de edición limitada.

AY Collective, un dúo de creadores de muñecas personalizadas, decidió aceptar el reto de equiparar a la figurilla como la modelo real. No sólo los rasgos característicos de la modelo han sido reproducidos, también los fastuosos trajes que ha lucido sobre la pasarela durante sus años de carrera.

En unos años, la vida de Wixson ha ido del sueño al éxito. La joven que no se imaginó acudir a su baile de graduación vestida en exclusiva por Jason Wu (quien diseña también para Michelle Obama), está considerada entre las 20 mejores maniquíes y, además, es una de la que mayores ingresos reporta. ¿Quién dijo que para triunfar como modelo hay que ser perfecta?

cristianjaen@live.com.mx

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