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cristina.pineda@eluniversal.com.mx
Lo sobrenatural no tiene que estar separado de las tradiciones mexicanas. Es por ello que parte del elenco de La Dama de Negro compartió una tarde de tamales con sus experiencias a lo largo de 23 años, pues dentro de unas semanas lograrán un récord de trabajo ininterrumpido.
Odiseo Bichir, Antonio Calvo y Rafael Perrín bromearon la tarde del sábado, un poco antes de iniciar la primera función en el Teatro Ofelia, su nueva sede en Polanco.
“En México somos muy afectos a conservar las tradiciones. Por ejemplo, le llama mucho la atención al extranjero que nos visita la Virgen de Guadalupe. Ella está siempre detrás de un teatro y eso no ocurre en el resto del mundo”, dijo Odiseo.
Aunque aún no saben qué celebración tendrán, se encuentran buscando un padrino o madrina que pueda develar la placa conmemorativa. “Después de más de 50 placas ya tocamos todas las esferas artísticas, política, cultural”, indicó Calvo, el productor.
Este nuevo espacio es uno de los más pequeños en los que se han presentado, por lo que contarán con la misma producción de hace 23 años. “Lo que se cambia es la perspectiva de las dimensiones”, señaló Perrín.
A partir del 3 de marzo y hasta diciembre Rafael Perrín se irá a vivir a Bogotá pues la obra se estrenará teniendo en el papel principal a Robinson Díaz (El Cartel de los sapos).
Para ellos no hay un secreto del éxito más que la razón que a la gente le gusta asustarse.
La experiencia se ha convertido en algo más paranormaldentro del proyecto. Lo más común, cuenta Calvo, es la presencia de un niño al que incluso ya lograron tomarle foto en la cual aparece sin cabeza.