Más Información
ana.pinon@eluniversal.com.mx
La primera ópera del compositor Federico Ibarra, Leoncio y Lena, estrenada en 1981, con libreto de José Ramón Enríquez, es presentada este fin de semana en el Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes con su versión más reciente, a cargo de Solistas Ensamble, con la dirección concertadora de Christian Gohmer y escénica de Valeria Palomino.
“Su primera versión fue para actores; con los años, el maestro Ibarra la fue modificando, la versión definitiva es de 2011 y se estrenó. Ahora nosotros presentamos nuestra producción con una lectura muy minuciosa. Creo que no se había podido llevar a escena con todos los cuidados que exigía. Nosotros ofrecemos una propuesta muy puntillosa con un equipo de trabajo que presentará un montaje novedoso y de buen gusto”, indicó Gohmer en entrevista.
La obra que se presenta hoy y el domingo aborda dos reinos imaginarios que arreglan la boda de los príncipes Leoncio, del reino del Popó, y Lena, del reino del Pipí, quienes se niegan a casarse y huyen. En esta adaptación, el preconcebido orden del mundo es alterado y prevalece el absurdo y el caos.
“Es un farsa que puede prestarse a puerilizar la ópera, yo no quería que fuera así.. La ópera aborda a las figuras que ejercen el poder, nos presenta a un rey irreflexivo y caprichoso, y llamarlo Rey del Popó es advertirnos que hay un payaso en el poder. Actualmente algo así podemos verificar que sigue ocurriendo. En esta propuesta hemos apelado al simbolismo que planteó el libretista, si bien el texto está íntegro, la escatología no es lo central; lo medular está enfocado en ese personaje loco que quiere casar a su hijo, pero también presentamos a un pueblo molesto con su gobernante, pero que no está dispuesto a hacer algo y termina por participar de las loas al Rey. Las sociedades solemos ser así”, dijo.
