Viena. —A ritmo de la herencia musical de la familia Strauss, la Filarmónica de Viena enviará el viernes próximo, bajo la batuta del letón Mariss Jansons, “energía positiva” para el año 2016 en su tradicional “Concierto de Año Nuevo”.
La 75 edición del concierto más famoso del mundo, que comenzará a las 11:15, hora local (10:15 GMT) del próximo 1 de enero, será retransmitida este año por televisión y radio a 90 países.
La amenaza del terrorismo yihadista también se ha hecho presente en vísperas del concierto, aunque el gerente de la Filarmónica de Viena, Andreas Grossbauer, aseguró en la presentación del programa que se “han hecho los deberes” para garantizar la seguridad del evento.
“Hemos tenido contactos con el ministerio (austríaco) del Interior, aunque nunca podemos estar seguros al cien por cien. Hay que vivir con ello”, afirmó Grossbauer.
Por tercera vez, Jansons, de 72 años, ha sido elegido para dirigir el tradicional homenaje a la dinastía Strauss; lo hizo en 2006 y 2012.
Mariss Jansons aseguró que afronta la cita con “felicidad” por tener otra vez la oportunidad de dirigir “el concierto de los conciertos”, pero con “responsabilidad y presión” para cubrir las expectativas de calidad.
“Es extraordinario dirigir este concierto que no se puede comparar con otro. Es casi algo sagrado”, aseguró.
Para confeccionar el programa, los responsables de la orquesta han debatido mucho, dijo el director, quien admitió que aceptó propuestas de los músicos y que sólo quedó fuera una pieza del primer borrador.
Jansons destacó que el programa es “interesante, fresco y novedoso” ya que, a su juicio, combina piezas populares y tradicionales con otras obras que no se han tocado nunca en el Concierto de Año Nuevo.
“Esperanza, alegría y humor festivo” es lo que se respira en la Sala Dorada del Musikverein, decorada este año con 30 mil pétalos de orquídeas, rosas y amarylis de color naranja.
El concierto comenzará con La Marcha de las Naciones Unidas, del austríaco Robert Stolz (1880-1975), con la que los filarmónicos conmemorarán el 70 aniversario de la primera Asamblea General de la ONU.
En el programa figura por primera vez la polca Violetta, de Johann Strauss (1825-1899). Tras el descanso, la tercera pieza será la polca francesa Sängerlust (Placer del cantante), seguida de la polca rápida Auf Ferienreise, en cuyas interpretaciones actuará el famoso coro de los Niños Cantores de Viena por sexta vez.
También el vals España, la obra más famosa del compositor francés Émil Waldteufel, hará su estreno en este concierto.
Protagonizadas por solistas del Ballet de la Ópera de Viena, las dos coreografías del checo Jirí Bubenícek tienen lugar en los jardines del Palacio de Verano de Schönbrunn y acompañarán primero a la polca rápida Ausser Rand und Band, de Eduard Strauss y después al vals Kaiser-Walzer, de Johann Strauss.
El programa consta de 18 piezas. A ellas se añaden, como es tradición, tres propinas, una sorpresa además de las clásicas El Danubio Azul (Johann Strauss hijo) y la Marcha de Radetzky (Johann Strauss padre).