Una fiesta se llevará a cabo hoy. El tenor Plácido Domingo dará un concierto en el Auditorio Nacional a las 20:30 horas para celebrar los 55 años de su debut en México. Estará acompañado por la Orquesta Sinfónica de Minería que tendrá como director invitado al maestro y pianista estadounidense Eugene Kohn, y también compartirá escena con la soprano mexicana María Katzavara, ganadora de Operalia.

El día de ayer en el ensayo general el tenor observaba con cuidado los preparativos del festejo. Con su mirada rodeaba el lugar. En todo momento se mostró atento a los detalles, al sonido, a los músicos y a las interpretaciones. Domingo portaba un traje negro, camisa azul y una gran sonrisa que permitía deducir que el tenor se encontraba mejor de salud.

Los instrumentos montados sobre el escenario están a la espera del gran momento. La luz los ilumina y logra crear grandes destellos que embellecen el “Coloso de Reforma”. Poco a poco los músicos van llegando vestidos con ropa casual, pantalones de mezclilla, tenis, camisas y blusas en distintas tonalidades son las principales prendas. En esta ocasión la formalidad no se hizo presente.

La música comenzó y el primero en cantar fue Plácido Domingo jr. “Tanto tiempo disfrutamos de este amor, nuestras almas se acercaron tanto así, que yo guardo tu sabor, pero tú llevas también, sabor a mí”, cantó frente a la mirada atenta de su padre que se encontraba sentado en una de las butacas.

Rapidamente los fotógrafos comenzaron a rodear al tenor para poder capturar la mirada de orgullo que produce ver a un hijo cantar sobre uno de los escenarios más importantes de México.

El tenor se levantó para dar instrucciones, para pulir su gran festejo. Domingo logró atrapar la atención de todos los presentes, las miradas se movían al compás de su caminar, sus palabras fueron escuchadas por todos. El maestro instruía para construir un gran evento.

Llegó el momento. Domingo se plantó en el escenario acompañado de Katzarava para interpretar un fragmento de la ópera La viuda alegre. Se tomaron de la mano, cantaron, rieron y bailaron. El tenor aconsejaba a la cantante que vestía de negro y portaba un abrigo con estampado animal print de leopardo.

Mientras los intérpretes cantaron los murmullos se esfumaron. Todos los presentes se concentraron en esas dos grandes voces que en la intimidad del Auditorio lograron crear escenarios musicales en todo el recinto.

Cada que una pieza terminaba los murmullos regresaban. Los músicos hablaban entre ellos para aconsejarse, marcar errores y lograr llegar a la perfección para la celebración. También se mostraban atentos a las palabras del tenor.

Este concierto sustituye al que fue cancelado el 31 de octubre debido a que Domingo se sometió a una operación, así que los boletos de la primera fecha son válidos para acudir a la presentación de hoy.

Plácido Domingo cuenta con gran reconocimiento internacional, no solo como cantante sino también como director de orquesta, productor, compositor y promotor de las artes. Ha interpretado a más personajes líricos que cualquier otro tenor en la historia de la música.

Al finalizar el ensayo Domingo se acercó a la prensa para agradecer todo el apoyo que le han brindado a lo largo de su carrera. También dijo sentirse orgulloso de su hijo y de la oportunidad que tiene de cantar junto a él en esta fecha tan importante.

Finalizó comentando que le gustaría que la gente lo recordara como una persona que hizo mucho por el arte. “La música hace feliz a la gente, logra que olviden sus penas y aunque nos ayuda en algo debemos reconocer que no en todo, necesitamos de más cosas”. Pero enfatizo en lo importante que resulta las artes para la vida.


lsm

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