ana.pinon@eluniversal.com.mx

El pianista Abdiel Vázquez y el compositor Juan Pablo Contreras están convencidos de que esta noche será histórica porque estrenarán mundialmente la obra Pirámide del Sol con la Orquesta Sinfónica Nacional, bajo la batuta de Carlos Miguel Prieto en el Palacio de Bellas Artes.

Los dos son jóvenes talentos con una importante trayectoria internacional. “¡Va a ser un suceso histórico!”, dice Vázquez.

Contreras escribió Pirámide del Sol como becario del programa Jóvenes Creadores del Fondo Nacional Para la Cultura y las Artes (FONCA). Se trata de su segundo concierto, el primero fue Ángel Mestizo, concierto para arpa que ganó el Primer Concurso de Composición Arturo Márquez.

“Ha sido toda una aventura. Es una obra con una orquesta grande, cuatro percusiones, con el piano como protagonista y conversador con el resto de la orquesta. Dura 25 minutos y hay líderes de secciones con gran lucimiento, lo que permite que haya variedad en colores. Es una obra hecha a la medida de Abdiel Vázquez. Es un pianista virtuoso, dramático en el escenario, posee una técnica de alto nivel y con él me sentí con la libertad de escribir todo cuanto quisiera, porque es un músico que no tiene límites. Quise retarlo, provocarlo, porque es trabajar con alguien que domina su instrumento brinda una total de libertad de creación”, dice Contreras.

El compositor explica que la obra nació tras imaginar que el diseño de Teotihuacan se recrea cuando se interpreta un concierto para piano, situando al instrumento solista (pirámide) al frente del escenario y rodeándolo con la orquesta (civilización).

“Es una obra de tres movimientos, con una duración de 25 minutos. El primero se titula “Juego de pelota”, hay un lenguaje juguetón, pero también dramático. El segundo es “Ofrenda”, un movimiento lírico con una parte muy agresiva porque hace referencia al sacrificio. Por último, “Danza emplumada”, que es una danza celebratoria”, explica el compositor.

La dotación es de una gran orquesta que incluye maderas a 3, metales completos y una vasta sección de 36 instrumentos de percusión tocados por cuatro ejecutantes. La dotación también incluye cinco timbales, arpa, celesta y cuerdas.

“Con mis anteriores obras me he enfocado en buscar una identidad mexicana, me apoyaba en melodías folclóricas, sones, corridos, pero ahora quise retratar un mundo nuevo, un mundo imaginario prehispánico. Quise buscar la esencia mexicana sin la obviedad de los sonidos, le escarbé más, me metí más a prfundidad. Me apoyé mucho en la percusión porque quería crear un sonido nuevo, como música de camara dentro de la orquesta, no quería que sólo el solista se luciera, sino que hubiera un diálogo con la orquesta. No me imagino repitiéndome a mí mismo”, añade.

El concierto con el pianista que actualmente reside en Nueva York, donde pertenece a la planta docente de preparadores vocales de Manhattan School of Music y trabaja regularmente con cantantes de la Metropolitan Opera House, se llevará a cabo hoy a las 20 horas y el domingo a las 12 horas en el marco del 30 aniversario conmemorativo del sismo de 1985.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses