La escritora J.K. Rowling envió a Bana Alabed, una niña siria de siete años, un e-book con todos los libros de Harry Potter, después de que la madre mandara un tuit a la autora preguntándole como podía conseguirlos.
La madre de Bana gestiona la cuenta de Twitter de la menor -en la que ya cuenta con más de 93 mil seguidores- y donde ha escrito que la pequeña "lee para olvidar la guerra".
Madre e hija, residentes en la ciudad sitiada de Alepo, vieron una de las películas del famoso mago que les encantó y la progenitora decidió contárselo a Rowling y trasmitirle lo mucho que le gustaría a la pequeña leer los libros.
La escritora no tardó en responderle: "Espero que leas los libros porque estoy segura de que te van a encantar", tuiteó. Lo que desconocía la creadora del universo mágico de Harry Potter es que la niña no tenía oportunidad de comprarlos.
"Le gustaría leerlos pero no los tenemos ¿Cómo podemos conseguirlos?", fue la respuesta de la madre.
En ese momento, a un miembro del equipo de Rowling se le ocurrió la idea de mandar el e-book a Alepo, algo que la propia autora celebró en la red social: "Brillante idea", escribió.
Tras el regalo, la madre de Bana tuiteó una foto de la pequeña sosteniendo un cartel en el que podía leerse: "Muchas gracias por lo libros, amiga J.K. Rowling. Te quiero, desde Alepo".
La escritora británica, de 51 años, respondió igual de cariñosa con un mensaje en el que le decía que también la quería y que se mantuviera "a salvo".
J.K. Rowling es una de las personas más ricas del Reino Unido gracias a la saga de Harry Potter, de la que ha vendido más de 500 millones de ejemplares en todo el mundo.
nrv