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Ofrecer una visión del pensador, poeta y ensayista mexicano Alfonso Reyes (1889-1959) más allá del erudito, destacar la relación entre sus letras y su vida, así como explorar su placer de vivir, es el objetivo del escritor César Benedicto Callejas con su novela Los minutos de Ulises.
Así lo aseguró el autor, quien presentará su obra el próximo 12 de octubre en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, acompañado por sus colegas Adolfo Castañón, Tatiana Nogueira y Eduardo Langagne.
En declaraciones difundidas por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), Benedicto Callejas señaló que "una de las intenciones de la novela es ofrecer una visión de Reyes más allá del erudito y proponer una relectura vital de su obra, más allá de lo monumental y lo lapidario".
Detalló que el título del libro remite a la figura del personaje mitológico de "Ulises", uno de los favoritos de Alfonso Reyes, quienes, aseguró, comparten características.
"Don Alfonso fue un hombre que disfrutó de su largo viaje diplomático, el cual comenzó por un exilio, pero se convirtió en todo un estilo de vida. Pese a ello, igual que Ulises, siempre trató de volver a casa", recordó el autor.
Por otra parte, agregó, tanto Ulises como Reyes llevaron consigo a casa todos los tesoros y el conocimiento que adquirieron en su viaje. El juego se concreta en los últimos 30 minutos de la vida de Reyes, en los que, conforme recuerda su vida, esa memoria se confunde con los pasajes de la Odisea.
Callejas señaló que su novela se enfoca en la reconstrucción de los últimos minutos de vida de Alfonso Reyes y, en específico, en su búsqueda de la plenitud de vivir, la pasión de la existencia y su retrato en la literatura.
"Reyes era un hombre con un potencial de gozo enorme, de profundas pasiones por lo que hacía, lo que contrasta con la imagen serena y simpática que habitualmente tenemos de él por su tarea diplomática y por la altura de su obra", expresó.
Finalmente, sostuvo que escribir sobre Alfonso Reyes es una muestra de gratitud al autor más importante en su vida como lector, así como un homenaje a la tarea que como maestra de creación literaria cumple Alicia Reyes, y el pago de una deuda de gratitud con la Capilla Alfonsina, donde se desarrolla prácticamente toda la novela.
"Espero que también sea una invitación a recorrer de nuevo la obra de Reyes, desmitificarla y devolverla al uso cotidiano de los lectores", finalizó.
sc
