Luego de que en solo 24 horas se reunieran más de 40 mil firmas en la página Change.org para exigir a la firma privada Medicus que cubra con el cien por ciento de las necesidades médicas requeridas por el escritor Ricardo Piglia a causa de la esclerosis lateral amiotrófica que padece, la respuesta ha sido favorable.
De acuerdo con el diario Clarín, el seguro médico del autor de “Plata quemada” anunció que cumplirá con el dictamen del juez en el que se le obliga a cubrir en su totalidad la medicación e insumos prescritos por el médico tratante.
Hasta anoche, cuando la compañía cedió a la exigencia, el argumento para no suministrar los medicamentos como se ordenó fue que el medicamento llamado GM604, el cual no erradica la enfermedad degenerativa pero sí limita su avance, está todavía en fase experimental y por ello no hay mecanismos establecidos para su ingreso a Argentina.
Ante este argumento, el pasado domingo el artista, sociólogo y amigo del escritor, Roberto Jacoby, subió a Change.org una solicitud para presionar al cumplimiento de la sentencia y esta ha sido firmada hasta el momento por casi 86 mil personas, entre ellas, las escritoras Claudia Piñeiro, Ana María Shua, Margo Glantz y Tununa Mercado.
El medicamento fue desarrollado en California por el laboratorio Genervon y tiene un costo de 100 mil dólares por dosis. Según el propio portal argentino, Piglia habría pagado de sus propia bolsa los dos primeros suministros.
Gente cercana al autor afirma que con las primeras aplicaciones de GM604 Piglia subió de peso y tuvo una mejoría visible.
La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad degenerativa de tipo neuromuscular que paraliza gradualmente este tipo de tejido y tiene altas probabilidades de un desenlace mortal.
Ricardo Piglia fue condecorado en septiembre de 2015 con el Premio Formentor de las Letras en Mallorca, España, pero no pudo asistir a la ceremonia a causa de su padecimiento. El editor Jorge Herralde se encargó de leer el discurso “Las afecciones y aficiones de la literatura”, en el que Piglia escribió: “La vida no debe ser vista como una continuidad orgánica, sino como un collage de emociones contradictorias, que de ningún modo, obedecen a la lógica de causa y efecto”.
rqm
