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Con la exposición “Un juego entre mí y yo”, una novela gráfica reproducida a escala humana en la que se aborda la vida del artista francés Marcel Duchamp (1887-1968), arrancó anoche el 43 Festival de Angouleme en la Casa de Francia, en esta capital.
Dedicada al artista que ejerció una fuerte influencia en la evolución del movimiento pop en el siglo XX, la muestra está basada en el libro “Marcel Duchamp. Una partida entre mí y yo”, de François Olislaeger (Lieja, 1978).
El texto editado por Turner, parece cobrar vida en esta exhibición que presenta una biografía escrita y dibujada por el escritor y artista belga Olislaeger, quien recurre a un formato muy largo en forma de acordeón en el que muestra la estructura tradicional de una historieta, creando al final un recorrido por los momentos claves de Duchamp.
De acuerdo con Olislaeger, tras haber realizado un libro de danza con la coreógrafa Mathilde Monnier, continúo su deseo de reflexionar sobre la forma de confrontar diferentes medios artísticos con la novela gráfica.
Dijo que un día escuchó en la radio una entrevista a Duchamp, explicando como él había imaginado el concepto “Ready-Made”, para describir su arte concentrado y fue entonces que ideó el proyecto de un libro.
Destacó que en ese tiempo, se enteró que en el Centro Pompidou en París tenía el proyecto para montar una exposición sobre Duchamp, así que coordinó esfuerzos para que su obra estuviera lista y se presentara a la par de la muestra en ese espacio museístico.
“Al poco tiempo me pareció un simple relato sobre la vida del artista, en novela gráfica, era limitado. Igual que Duchamp, busque darle otra dimensión; y utilizando temas para él, como el azar, el caos, la cuarta dimensión, opté entonces por una biografía no lineal.
“Lo que realmente le corresponde es la idea del recorrido, de la caminata, de la avanzada, en el campo artístico como en el relato gráfico”, dijo el artista belga quien agregó que de ahí su deseo de utilizar uno de sus cuadernos en acordeón sin páginas fijas, sin colores, sin un esquema preestablecido.
Indicó que este formato permite al lector convertirse en actor de su propia interpretación. “No hay una manera unívoca de leer la vida del artista, sino varios caminos que pueden seguirse en el libro, en su historia, en un recorrido”, expresó.
Tras la apertura del festejo, se convocó a todos los autores de historieta del país a sumarse a las 24 horas del Cómic en un evento organizado por la Casa de los Autores desde la histórica ciudad del cómic: Angouleme, Francia.
De manera paralela a la exposición, se exhibe la colección de novela gráfica de la Mediateca de Casa de Francia, una colección que fue la primera abierta al público en México desde hace varios años y que contiene diversos títulos de cómics clásicos y contemporáneos.
rqm
