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abida.ventura@eluniversal.com.mx
Después de tres años de viajar por el mundo, esta semana llegó al Museo Nacional de Antropología Mayas, el lenguaje de la belleza. Miradas cruzadas, exposición que además de mostrar la estética de esa civilización antigua, permitirá al INAH traer al país otras colecciones internacionales el próximo año.
Desde que se inauguró a finales de 2013 en el Museo Maya de Cancún, la muestra viajó a Beijing, a Berlín y a la ciudad italiana de Verona. En reciprocidad, el instituto logró traer a México Frobenius, el mundo del arte rupestre, que actualmente se exhibe en el Museo de Reforma y, para 2018, traerá una selección de piezas de arte provenientes del Museo del Setecientos Veneciano. “Gracias a este tipo de exposiciones, el INAH puede ofrecer al público mexicano muchas obras de arte que de otra manera costaría muchísimo traer al país”, destacó ayer en conferencia de prensa José Enrique Ortiz Lanz, coordinador nacional de Museos y Exposiciones del INAH.
Añadió que gracias a la otra exposición Mayas, revelación de un tiempo sin fin, que también ha itinerado por ciudades como Liverpool, París y Brasil, llegarán próximamente al país una selección de piezas del Museo del Mundo en Liverpool y otra del Museo Quai Branly. “En el caso de Brasil, por motivos políticos no se ha podido concluir; con Liverpool tendremos la exposición el próximo y estamos trabajando con el Quai Branly”, detalló el arquitecto.
Mientras tanto, desde hoy la Sala de Exposiciones Temporales del Museo Nacional de Antropología acoge la muestra dedicada a revisar la concepción de belleza en la civilización maya. Está integrada por 333 piezas provenientes de diversos sitios arqueológicos del sur del país y llega con una nueva propuesta curatorial: “Celebra el primer encuentro de hace 500 años entre el mundo occidental y los mayas”, expresó Ortiz Lanz.
El museógrafo recordó que fue en 1517 cuando Francisco Hernández de Córdoba y 12 encomenderos de la isla de Cuba emprendieron un viaje que cambiaría no sólo a Europa, sino a América, el nuevo continente. En las tierras mayas, aquellos exploradores descubrieron a los pueblos indígenas que les sorprendieron por sus formas de vida y conocimientos. En esta nueva museografía, la exposición dedicada a revisar la belleza y la estética de los mayas, se incluyen testimonios de los españoles que describen las formas de vida, atuendos y concepciones del mundo de los habitantes de esas tierras recién descubiertas por ellos.
Según la curadora Karina Romero Blanco, esta nueva versión en el Museo de Antropología incluye 35 piezas inéditas, como dos paneles de Pomoná que representan a uno de sus gobernantes y a su consorte; un fragmento de textil descubierto en la Cueva de El Lazo, en Chiapas; y una vestimenta ritual hecha con conchas, de Oxtankah, Quintana Roo.
Mayas, el lenguaje de la belleza. Miradas cruzadas se podrá ver hasta noviembre próximo.