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Más conocido por sus obras en gran formato, Joaquín Sorolla también supo plasmar la monumentalidad de una escena marinera en 29x44 centímetros, los que mide Llegada de las barcas , que saldrá a subasta en Londres por 300 mil libras (383 mil dólares) y se espera llegue a las 500 mil (638 mil).
Oculto desde hace más de 30 años en una "colección particular europea", Christie's lo pone a la venta el 13 de julio y hoy lo presentó en Madrid para llamar la atención de sus clientes en España y de las instituciones del país, que "todavía" no han manifestado su intención de pujar, aunque sería "una gran satisfacción que lo hicieran", dijo Pilar González de Gregorio, presidenta de la casa de subastas.
Pintado alrededor de 1903 en la playa del Cabañal de Valencia (este de España), se trata de una obra "de gran monumentalidad aunque de pequeño formato, como se puede apreciar en las velas de las barcas, porque era un gran artista", destacó Carmen Schjaer, consejera delegada de Christie's.
Sorolla (Valencia, 1863 - Madrid, 1923), el "marinero en tierra" que siempre pintó el mar desde la arena porque no le gustaba navegar, plasmó con "pinceladas frescas y rápidas" la llegada a la orilla de unas barcas de pescadores y el trajín de la descarga de las capturas y de las mujeres que las recogen en sus cestos, creando un conjunto luminoso, colorista y cargado de movimiento.
"La perspectiva está muy bien resuelta, con la barca en el mar pero apoyada en la arena, como también la unión entre mar y tierra, que es muy difícil. Es notable la transparencia del agua y la luz en las velas. Es ambicioso pese a su formato", explicó sobre el lienzo la experta en pintura del siglo XIX de la compañía, Adriana Marín Huarte.
También subrayó la "belleza especial" de los personajes femeninos González de Gregorio , quien recordó que el prolífico pintor valenciano llevó a sus pinturas su "gran atracción por las mujeres".
Corresponde a una época en la que Sorolla empieza a conocer el éxito, en la que "ha encontrado su camino propio", el denominado luminismo, por el que pintó al aire libre, dominando la luz y recreando escenas cotidianas y paisajísticas de la vida mediterránea.
Fue antes de lograr su reconocimiento masivo en Estados Unidos, desde donde su obra se popularizó también en Latinoamérica, lo que llevó a la Hispanic Society a encargarle la serie Regiones de España, un esfuerzo que le costó la vida porque pasó seis años "recorriendo el país, pasando horas al calor y al frío", tras lo que sufrió una apoplejía en 1920 que le impidió seguir pintando y le causó la muerte tres años después.
Su precio de salida, 300 mil libras (350.000 euros) es "muy atractivo para un pintor de tan larga trayectoria", aseguró Martín Huarte.
Según la casa de subastas, hasta ahora el récord de venta de un cuadro del artista español lo logró La hora del baño en 2003, cuando se vendió por 3.7 millones de libras (unos 4.2 millones de euros).
Llegada de las barcas
será uno de los 126 cuadros de pintura europea y orientalista que el 13 de julio subastará Christie's en Londres, entre los que hay obras firmadas por Ludwing Deutsch, Antonio María Fabrés, Camille Corot o Gustave Courbet, entre otros.
sc