Taiyana Pimentel, directora de La Tallera, explicó esta tarde aquí que la exposición "Domingo Salvaje", de Pedro Reyes, que será inaugurada en ese centro cultural el próximo sábado, es la más reciente y más ambiciosa de las producciones del artista, la cual demandó poco más de seis meses de preparación.
Se trata, dijo, de una colección realizada en colaboración entre el estudio del artista, la Secretaría de Cultura federal y el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). "Cuenta con un cuerpo de obras donde impera un problema objetual y escultórico, una investigación sonora desde una perspectiva visual y plástica, y por último, una película muy puntual".
Durante un recorrido previo por ese espacio, donde fuera la casa y estudio del muralista mexicano David Alfaro Siqueiros, Taiyana Pimentel explicó que la exposición retoma un problema antropológico que se nota en toda la exhibición. Desde otra perspectiva, esta es una muestra que se acerca a la historia de los psicofármacos desde distintas ópticas.
Va directamente a los orígenes de las culturas universales en una suerte de paseo por la filosofía, la música, las letras y otras formas de quehacer artístico y cultural de todos los tiempos. Hay piezas en las que el público escuchará a Octavio Paz leyendo en voz alta sus poemas, al tiempo que en el fondo notará música contemporánea que lo acompaña.
La escultura se amalgama con reminiscencias históricas, las pasiones humanas se plasman en otras piezas donde los asistentes pueden golpear a una escultura que retoma la vertical para reflejar en su rostro el de quien la golpeó. Los maridajes sensoriales, emocionales, culturales, filosóficos, históricos y estéticos son la pátina en el conjunto de la exposición.
De acuerdo con la directora del recinto, uno de los pocos en su tipo que el INBA tiene fuera de la Ciudad de México, es una exposición donde Pedro Reyes resume en una línea de investigación qué literatura, música y objetos han influenciado su pensamiento artístico para dar forma y vida a cada una de las piezas que conforman la muestra.
Señaló que es importante que un artista como éste logre una conexión con la historia de Morelos y con el papel que las comunidades jugaron en Cuernavaca en los años 60 y 70 del siglo XX. La exposición observa al pensamiento comunitario de los teólogos de la liberación, filósofos y educadores y ciertos experimentos de laboratorio que se realizaron en esta entidad buscando, a través de la idea comunitaria, otro concepto de sociedad.
Por su parte, Pedro Reyes explicó que en la muestra hay constantes. Una, es la de los filósofos griegos, otra, la etnopsicofarmacología o sea el uso de las plantas alucinógenas que son parte de la tradición mexicana, y diferentes vegetales que han sido empleados en la medicina autóctona. Una más es la literatura, sobre todo, la poesía, además de la música.
Reyes dijo, sin embargo, no se trata de una exposición que haga apología de las drogas, ni es un recorrido por la vida y pensamiento de los filósofos griegos. Es una suma de ideas presentada a través de esculturas; el título le viene porque el domingo es un día de asueto y relajamiento, y lo salvaje evoca la liberación de la fuerza y las pasiones del ser humano.
Ejemplificó lo anterior al citar la pieza "La caverna de Platón", obra que pide prestado el nombre de una alegoría que aparece en "La República", libro de ese pensador, donde se describe con espeluznante detalle un espacio cavernoso donde habitan cautivos esclavos que sólo han visto sombras y penumbras a lo largo de sus respectivas y tristes existencias.
Un día, uno de ellos logra escapar y conoce el mundo exterior, el mundo de las ideas. Regresa a la caverna para platicar sobre sus descubrimiento a los demás prisioneros, pero éstos no le creen, pues no conciben que exista un mundo como el que su compañero les describe. Deciden matarlo porque todos ellos prefieren quedarse con su mundo de sombras.
Es una metáfora filosófica, pero descrita como un espacio arquitectónico. El artista se dio a la tarea de buscar grabados e imágenes de ese sitio y halló varias, pero descubrió también que nunca se había construido un proyecto arquitectónico de esa caverna. De esa forma, él construyó un modelo y esa pieza será construida en formato de seis metros por seis metros en su base con ocho metros de alto. Y así, cada pieza tiene su propio discurso.
rqm