Las instalaciones de la Procuraduría General de la República en avenida Vallejo fueron sede de un singular evento este medio día: la destrucción con soplete y sierras de 93 esculturas apócrifas. Se trata de piezas que ostentaban la firma del escultor Jorge Marín y que habían sido decomisadas en septiembre pasado en dos operativos en Iztapalapa e Ixtapaluca, Estado de México.
Los decomisos fueron producto de una denuncia del estudio de Marín y la incautación se llevó adelante por parte de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra los Derechos de Autor y la Propiedad Intelectual. José Guadalupe Medina Romero, subprocurador especializado en Investigación de Delitos Criminales de la PGR, dijo que durante 2015 se aseguraron casi 9 millones de objetos como parte de delitos contra marcas y patentes.
En el acto estuvo, entre otros, el artista Jorge Marín, quien dijo que la destrucción de estos materiales es un logro en defensa del Patrimonio Cultural.
Con el material destruido se creará una escultura diseñada por Javier Marín, hermano del artista en cuestión.
rqm