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La artista mexicana Carmen Parra ha recreado, junto al siciliano Beppe Vesco, un cuadro de Caravaggio robado en 1969 y en manos de la mafia y que ahora se expone donde se perpetró el hurto, el palermitano Oratorio de San Lorenzo.
La obra, titulada "Un Hombre en Fuga, el Caravaggio de Carmen Parra y Beppe Vesco", es una interpretación del lienzo "La Natividad" del pintor italiano y se exhibe hasta el 8 de diciembre en la capital de la isla de Sicilia.
El paradero de la obra original se desconoce, pero diversos testimonios de mafiosos indican que la pintura de Caravaggio está en algún sitio bajo control de la organización criminal.
La recreación expuesta ahora en Palermo es una obra que destaca la cultura y la recuperación de la memoria histórica mediante el empleo de únicamente dos colores en el lienzo, el rojo y el azul, que representan, según los autores, toda una declaración de intenciones.
El color "rojo sangre" que inunda las siluetas de los siete personajes situados sobre un intenso fondo azul simboliza "la brutal agresión que sufrió el cuadro al ser robado violentamente", explicó Carmen Parra (Ciudad de México, 1944).
El azul intenso que baña el lienzo simboliza una imponente ola del Mediterráneo que envuelve Sicilia y que "se ha llevado mar adentro la memoria de este cuadro", señaló la artista.
Parra y Vesco hacen con su creación un llamamiento a las instituciones y a la opinión pública a fin de que no se olvide la obra maestra de Caravaggio, cuyo robo es definido por la pintora mexicana como un "acto criminal que va contra la cultura".
Se trata de la primera vez que una artista mexicana presenta su obra en el Oratorio de San Lorenzo, en colaboración con Vesco (Palermo, 1949).
La intención que subyace tras el lienzo es "la necesidad de rescatar la identidad histórica, íntimamente ligada a la memoria cultural", relató Parra, que además consideró que su reinterpretación es fruto de una serie de "coincidencias mágicas".
Parra y Vesco atesoran la ambición de sensibilizar al gran público porque, en palabras de Parra, "la pintura es un diálogo permanente con las almas de las personas".
La obra de la "Natividad" de Michelangelo Merisi, conocido como "Caravaggio", encabeza la lista de las diez obras de arte robadas más buscadas por el Comando de Carabineros para la Protección del Patrimonio Cultural de Italia.
El cuadro que representa un luminoso portal de Belén salido de sus pinceles fue sustraído durante la noche del 17 de octubre en 1969 en el Oratorio y, según la policía, su valor es incalculable y se encuentra muy probablemente en manos de la mafia.
Un miembro arrepentido de Cosa Nostra, la mafia siciliana, Francesco Marino Mannoia, explicó durante un juicio en 1996 cómo se robó el cuadro: arrancándolo del marco con una hoja de afeitar, lo que causó importantes desperfectos.
Sin embargo, las esperanzas de encontrar esta obra maestra de Caravaggio resurgieron cuando el miembro de Cosa Nostra Giovanni Brusca intentó, aunque sin éxito, negociar un mejor trato carcelario a cambio de información sobre el paradero del cuadro.
El también mafioso Salvatore Cangemi aseguró durante otro proceso que el lienzo no se ha destruido y que se expone durante las reuniones de Cosa Nostra como "símbolo de su poder".
Una reelaboración de la Natividad que supone un puente entre América Latina y Europa en una creación que intenta recordar la cultura robada porque, "sin la memoria no hay cultura".
Y es que, como dice la pintora mexicana, "en estos momentos de barbarie la cultura es el único modo de pacificar".
rqm