Más Información
Hay decenas de galerías y museos, libros, películas y revistas cuyos nombres vemos sin saber que detrás de cada uno está el sello de Vicente Rojo: el Centro Cultural Santo Domingo y Jardín Histórico Etnobotánico, las galerías Juan Martín y López Quiroga, las portadas de Las batallas en el desierto (Ediciones Era) y Cien años de soledad (Sudamericana, 1967), y un alfabeto para la revista Plural, entre muchos otros ejemplos.
Para Rojo, las letras son un acontecimiento; lo dijo el pasado jueves al presentar la exposición Escrito / Pintado, que este sábado se inaugura en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo: “Las letras son un acontecimiento que nos rodea desde que aprendimos a leer, desde niños”, dijo el artista nacido en Barcelona en 1932.
“La letra, además de acompañarme desde niño, como a todos, me acompañó simplemente por el hecho de leer, que es lo que todos hacemos. Siempre que he tenido en mis manos un libro que he podido para armar, me he hecho la ilusión de que me hubiera gustado haber escrito ese libro, pero visualmente ese es el fondo de mi trabajo”, comentó el artista.
Esta exposición no es una retrospectiva de su obra artística, sino una muestra que en una primera parte contiene el conjunto de sus diseños en revistas, carteles, libros; las colaboraciones con escritores que dieron pie a libros de edición limitada; pinturas de series como Negaciones y Señales; pinturas que son parte de su serie de cartas a escritores; y están también los pequeños escenarios creados para el libro Circos, hecho con José Emilio Pacheco, y que son parte de las recientes adquisiciones de su obra realizadas por la UNAM (adquisiciones integradas además por los libros de colaboraciones con escritores y libros de edición limitada, y algunas pinturas).
Una segunda parte de la muestra está compuesta por las pinturas y esculturas de los últimos tres años, a lo largo de las cuales está presente ese acontecimiento del que habló Rojo. Obras que, además, ya describe como puntos de partida para nuevos proyectos.
Escrito / Pintado redondea lo que ha sido mi trabajo, dijo el artista. Es un homenaje a la vigencia artística de Rojo, definió Amanda de la Garza, quien fue curadora de la exposición junto con Cuauhtémoc Medina.
Para el curador, la muestra “es un intento de entroncar los dos campos de práctica centrales de Rojo: el de diseño gráfico y edición, y su práctica de pintor; es un gran ensayo sobre la letra como la base de su trabajo en el campo del diseño editorial y base también de su interés por la geometría”.
Al recorrer la exhibición, Medina describió que a lo largo de las salas se pasa de una presentación del contenido visual y formal del campo editorial, a un campo relacionado con lo pictórico y se explora luego el terreno de colaboraciones. El Alfabeto vertical, por ejemplo, una de las nuevas series de grandes pinturas, es una especie de transición hacia las esculturas desplegadas en el interior y en la fachada del MUAC. Medina, quien es curador en jefe de ese recinto, adelantó que Vicente Rojo diseñó una tipografía, Alfabeto Vertical, que va a ser utilizada para la gráfica de la exposición.
La muestra está conformada por más de 300 obras.
La segunda parte, llamada Casa de Letras, comprende 36 cuadros de gran formato, ocho esculturas de la serie Alfabeto primitivo y 12 esculturas monumentales de la serie Alfabeto urbano. Casa de Letras es resultado de una comisión del patronato que formó Isaac Masri, desde Estación Indianilla.
También se editó un catálogo con textos de los curadores, así como ensayos de Marina Garone Gravier, Daniel Garza Usabiaga y Federico Álvarez. La muestra se realiza en coproducción con el Colegio Nacional.
Este sábado también se realizará la inauguración de las exposiciones Fonomicroscopia del DF, de Carole Chargueron, (Francia, 1966); y Traslaciones topográficas de la Biblioteca Nacional, de Jorge Méndez Blake (México, 1974), una muestra donde el artista continúa su investigación en torno de libros y bibliotecas, y que persigue activar las relaciones museo-biblioteca y poesía-artes visuales.
