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Los salones de la Sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario, que en los últimos años fueron utilizados por maestros y alumnos del Seminario del Taller Coreográfico de la UNAM, fueron cerrados “por trabajos de mantenimiento”, lo que provocó que al menos 115 alumnos no tomaran sus clases; así lo informó la maestra Miriam Pacheco.
De acuerdo con la comunidad del Seminario, en la mañana del sábado fueron cerradas las instalaciones y se colocó un aviso: “Por trabajos de mantenimiento preventivo y correctivo, los salones de ensayo se abrirán hasta nuevo aviso”.
Pacheco indicó a EL UNIVERSAL que el pasado viernes sostuvieron una plática con personal del área jurídica de la Universidad Nacional y les confirmaron una reunión con la Coordinación de Difusión Cultural el próximo 16 de enero, día en el que se prevé que se definirá el rumbo del Seminario.
“Venimos y todo estaba bien. ¿Por qué si estoy ahí, si fuimos a la Coordinación, con los abogados, por qué no nos dicen nada? ¿Por qué el mantenimiento no se hizo en vacaciones, cuando en la UNAM se maneja así?”, comentó Miriam Pacheco sobre el cierre de las instalaciones.
La maestra aseguró que este lunes buscarán hablar con Jorge Volpi, coordinador de Difusión Cultural desde diciembre de 2016, con quien a la fecha, no se han reunido, ni se ha pronunciado sobre el conflicto.
El sábado en la mañana se llevó a cabo una asamblea de maestros y padres de familia del Seminario y acordaron que en la semana usarán espacios en la Facultad de Ciencias en Ciudad Universitaria para las clases.
El convenio entre la UNAM y la AC. que administra el Seminario se dio por concluido el 17 de diciembre, además se hizo un llamado a la comunidad para que desalojara las instalaciones de la Miguel Covarrubias.
Sin embargo, luego de que Volpi indicara que analizaría la situación que inició con su antecesora Teresa Uriarte y que comenzaran las vacaciones, el desalojo no se hizo. Por ello, maestros y padres planeaban reiniciar clases.
Pacheco informó que en una reunión con los administrativos de la UNAM, en diciembre, se ofreció al Seminario utilizar espacios alternos como gimnasios dentro de Ciudad Universitaria, pero se negaron por considerar que no son adecuados para una disciplina como la danza.
