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“Vivimos tiempos difíciles para el aprecio del arte de la actuación dramática. Tiempos confusos para la estética de la teatralidad”, dijo esta tarde el director de escena Luis de Tavira, en su discurso de ingreso a la Academia de las Artes.
Durante la ceremonia de bienvenida como académico de número, De Tavira leyó su discurso La pregunta de Stanislavski en el que evocó cómo el actor y director de escena ruso Konstantin Stanislavski observó una función de La dama de las camelias, protagonizada por Eleonora Duse, y sobrevivió a “un terremoto interior”.
“Frente a la actuación de Eleonora Duse, Stanislavski se preguntó: ¿Qué hace a una actriz? Los primeros pasos de la respuesta a esta pregunta lo llevaron a formular todo un sistema. Tras el recorrido de esta evocación hemos hallado el punto de partida de la reflexión. Es una pregunta. Ya no sólo la de Stanislavski, la nuestra aquí y ahora. ¿Qué hace el actor?”, dijo De Tavira.
Y continuó: “¿En qué consiste ese hacer que en castellano y en México llamamos actuación y que entre otros efectos puede tener la vida de transformar a quien la hace –según la expresión del príncipe Hamlet- en la monstruosa condición del actor o de la actriz, según el arte? Hemos hallado al fin el punto de partida de una reflexión necesaria”.
Directores de escena, actores, dramaturgos, escenógrafos como José Sole, Julieta Egurrola, Arturo Beristain, Angelina Peláez, Sergio Vela, Mariana Gaja, Sandra Félix y David Olguín, ovacionaron de pie durante varios minutos al director de la Compañía Nacional de Teatro.
La respuesta a su discurso la ofreció el dramaturgo Alejandro Luna, quien rescató algunas declaraciones que De Tavira ha dado a la prensa acerca de cómo inició en el teatro.
En un breve encuentro con la prensa, De Tavira dijo sentirse conmovido por su ingreso. “Me siento muy honrado, pero también muy responsable de lo que significa. Se me invita a entrar a este admirable colegio para compartir la reflexión del teatro como arte”, indicó.
De Tavira sostuvo que buscará contribuir al aprecio del arte mexicano. “Esta invitación me llega en un momento en el que me siento retado a seguir trabajando intensamente. Me llega al final de la etapa que ha durado los últimos 10 años de mi vida que es la consolidación de la Compañía Nacional de Teatro. Ahora me abro a nuevos retos y a preguntarme a dónde me lleva el teatro”, dijo.
Sostuvo que las preguntas de Stanislavski originaron un cambio profundo en la comprensión del teatro. “Debemos caminar hacia la elucidación de lo que ha sido la modernidad en el arte de la actuación y cuáles son los retos hoy. Se ha reflexionado poco y cuando se ha hecho, se ha hecho con poca profundidad. Me interesa mucho seguir articulando el discurso de una experiencia ganada en 50 años de estar contemplando el proceso del actor e intentando contribuir al desarrollo de este arte”, comentó.
Finalmente indicó que el proceso de relevo en la dirección artística de la CNT está en manos del INBA y de la Secretaria de Cultura, y que su salida tendría que ocurrir en próximos días.
La Academia de las Artes está integrada por 35 académicos de número distribuidos por grupos de cinco en las secciones que los conforman: arquitectura, artes escénicas, escultura, gráfica, historia y crítica de arte, música y pintura. Sus 18 miembros fundadores fueron designados por la Secretaría de Educación Pública al momento de instituir esta Academia por decreto presidencial en 1966.
Actualmente es dirigida por Louise Noelle Grass.
nrv
