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México es un país que cuenta con una vasta historia aeronáutica que se remonta hasta la primera década del siglo XX. En 1906, por ejemplo, aquí iniciaron los primeros proyectos para volar en un aeroplano; en enero de 1910 se realizó el primer vuelo tripulado en Latinoamérica; en 1911 Franciso I. Madero fue el primer Presidente en el mundo en volar y en ese mismo año llegaron los primeros aviones de uso militar. Años antes, incluso, el propio Porfirio Díaz había mostrado su interés en la aviación y había mandado a personas a capacitarse en la materia.

Los datos que demuestran que México ha sido un pionero en la aviación no faltan. Sin embargo, es un tema que ha sido poco tratado por los especialistas o desde la academia. “Es una historia que en ocasiones queda opacada”, comenta en entrevista Oscar Fernando Ramírez, presidente de la Sociedad Mexicana de Estudios Aeronáuticos Latinoamericanos (SMEAL), una asociación civil que se creó hace siete años por un grupo de “amantes de la historia y de los aviones” con el fin de rescatar, preservar y difundir la historia de la aviación en México y Latinoamérica.

Este año, en el marco de los 100 años de la Fuerza Aérea Mexicana, esta asociación trae, por primera vez en el país, el XV Congreso Internacional de Historia Aeronáutica y Espacial, encuentro que organiza la Federación Internacional de Estudios Históricos, Aeronáuticos y Espaciales (FIDEHAE) con el fin de hablar sobre los primeros diseños aeronáuticos.

El encuentro, que se llevará a cabo en la Escuela Libre de Derecho del 19 al 23 de octubre próximos, tendrá como tema central “Pioneros en el Diseño y Fabricaciones Aeronáuticas” y reunirá a historiadores provenientes de 11 países, como Argentina, Brasil, Chile, España, Estados Unidos, Perú, República Dominicana y México.

“Cada país va a presentar ponencias sobre sus pioneros, sobre las primeras aeronaves que volaron en los respectivos países, sobre los inicios de la aviación y sus construcciones, como el caso de Brasil, que fue uno de los pioneros de la aviación mundial y que sigue teniendo una industria fuerte”, señala Alfonso Flores Ramos, vicepresidente de la SMEAL y presidente del comité organizador del congreso.

Este foro, que también busca reflexionar sobre la importancia del rescate de esta historia poco conocida, también incluirá actividades como la instalación de una ofrenda floral en el Monumento al Escuadrón 201.

Apuesta por museo. Una de las actividades que la SMEAL ha llevado a cabo desde su fundación ha sido el rescate de piezas de valor histórico para la aviación mexicana, incluidas aeronaves. Se trata de objetos que han sido reunidos por los miembros de esta sociedad, entre ellos pilotos, capitanes y amantes de la aeronáutica. La idea, explica Ramírez, es abrir en México un museo nacional de la aviación, ya que si bien existe un Museo Militar de Aviación de la Secretaría de la Defensa Nacional, en la base militar de Santa Lucía (estado de México), hace falta uno que hable sobre la historia y los pioneros de la aviación civil.

“Es una tristeza que no tengamos un museo de este tipo. Hay museos de muchas cosas, pero no tenemos uno de aviación. Se puede decir que es hasta vergonzoso”, dice Ramírez, quien asegura que la asociación que dirige cuenta ya con diversos objetos de colección, entre ellos un avión F-105 y la cabina de un Boeing 707.

El programa del congreso se puede consultar en: www.smeal.com.mx

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