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Que María Katzarava hubiera vestido de frac al interpretar a la cortesana “Violeta” y que hubiera muerto en una habitación de hospital con el piso cubierto de flores de papel blancas, fueron dos de las razones por las que la noche del domingo Juliana Faesler y Clarissa Malheiros, fueron abucheadas durante el estreno de la ópera La Traviata en el Palacio de Bellas Artes.
Los cantantes María Katzarava, Jesús Suaste y Arturo Chacón, y el director concertador Srba Dinic al frente de la Orquesta y Coro del Teatro de Bellas Artes, tuvieron una buena recepción entre los asistentes, no así las creadoras de la puesta en escena de la ópera en tres actos de Giusseppe Verdi.
El disgusto del público también fue por la escenografía y el vestuario que se modernizó demasiado. Un par de señoras de la luneta lamentó que “Violeta” haya aparecido de frac, lo que les pareció una aberración, pero también fuera sacada de su contexto situada en el siglo XVIII.
Gente más joven celebró el montaje tan contemporáneo para una historia tan dramática como La Traviata, ópera que tiene tres funciones más: hoy y el próximo jueves a las 20 horas, y el domingo 14 de junio a las 17 horas.
