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El trabajo de los caricaturistas es "darle luz al lector", aseguró el francés Jean Plantureux, fundador de Cartooning for Peace (Caricaturizando para la Paz), organización nacida en 2006, que brinda protección y asesoría jurídica para los dibujantes que ejercen su profesión en entornos de riesgo.
En el marco del primer Congreso Latinoamericano de Cartón Político, Ilustradores y Dibujantes, (FILO), el caricaturista francés recordó con tristeza el asesinato de "amigos dibujantes de Charlie Hebdo", sin embargo, enfatizó que tras los hechos ocurridos en enero pasado "necesitamos ser más fuertes e inteligentes que los bárbaros".
El monero portugués António Antunes, resaltó en el Auditorio de la Universidad del Claustro de Sor Juana, que los cartones siempre "llevan una carga de opinión" y destacó que la organización ayuda a redignificar y a defender el valor de la profesión. Agregó que no encuentra problemas editoriales en los medios, pues "siempre encontraría manera de criticar".
En la mesa "El cartón editorial y la globalización/Cartooning for peace", el monero Ángel Boligán, colaborador de EL UNIVERSAL, dijo que en México no se enfrentan con el problema de dibujar a Mahoma como ocurre en Europa, "pero aquí tenemos nuestros propios Mahomas, que son aún más peligrosos y están en el poder".
Añadió que en el país existen caricaturistas críticos ante el poder y resultan provocadores, y narró: "cuando llegué a México me dijeron que no podía dibujar al presidente, al Ejército ni a la Virgen", sin embargo ya se han hecho sátiras de todos ellos, "y seguiremos con la punta de nuestros lápices apuntando al mal", remató.
Respecto al tema, el dibujante ecuatoriano Xavier Bonilla, indicó que los límites "son una trampa en la que no se deben detener porque la razón de ser del humor radica en rebasar esos límites", sin embargo, el límite que se pueden imponer periodistas, caricaturistas y ciudadanos es debido "al miedo por la amenaza que se puede cumplir: el asesinato".
La venezolana Rayma Suprani calificó al cartonista como un librepensador con una gran responsabilidad para con la sociedad, y eso "nos convierte en seres muy peligrosos para el poder", por contar con elementos para enfrentarlo, pues el ciudadano no cuenta con los medios para confrontar a un poder "con tanto dinero y con tan pocos escrúpulos".
La monera mexicana Cintia Bolio señaló que la censura puede ser un premio, "porque indica un trabajo bien hecho". Por su parte, el ilustrador cubano Arístides Hernández mencionó que la tarea de un caricaturista es encontrar "diferentes visiones a partir de un tema".
El Congreso, que cuenta con 60 caricaturistas de 14 naciones, se celebra en la Universidad del Claustro de Sor Juana y en los museos De la Ciudad de México y De Arte Popular y continuará hasta el 5 de septiembre con exposiciones "nunca antes vistas en el Distrito Federal, por la congregación de caricaturistas internacionales en compañía de maestros mexicanos", concluyó Bolio.
sc
