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Aunque ya trata con clientes en tiendas, estaciones de tren y grandes almacenes en Europa, ahora el robot humanoide Pepper atiende por primera vez a personas en el sector salud, como recepcionista en dos hospitales de Bélgica.
Pepper, que fue lanzado con fanfarrias en Japón hace exactamente un año, comenzó a trabajar en centros de salud en las ciudades de Lieja y Ostende, donde es utilizado para dar la bienvenida a los visitantes y pacientes, así como evitar problemas de recepción.
El robot, de 120 centímetros de altura, puede comprender y responder a una gama de emociones humanas, tiene capacidad para conversar en varios idiomas y también comunicarse a través de su tableta que lleva en el torso, además tiene ruedas para trasladarse.
En el hospital de Lieja, Pepper se encuentra en la zona de recepción para dar la bienvenida a los visitantes, responde a preguntas simples y da instrucciones sobre cómo llegar a otra área, mientras que en Ostende se agrega la posibilidad de que los acompañe si se lo piden.
El androide es creación del gigante japonés de telecomunicaciones Softbank y la compañía francesa de robótica Aldebaran, está siendo comercializado como asistente con un precio de mil 850 dólares en su forma básica, pero la versión del nosocomio cuesta 34 mil dólares.
El elevado precio de la versión hospitalaria se debe a su software especialmente diseñado por la firma belga Zora Bots y a los servicios de búsqueda.
“Es como una enfermera que explica a los pacientes. Ayuda a los niños y un servicio como éste es muy importante, nos va a ayudar mucho”, afirmó Catalina Gilen, enfermera en el hospital pediátrico CHR de Ostende, en reportes de la radio televisión belga RTBF.
jpe