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Quien es hábil para analizar información y crear productos con el lenguaje hablado o escrito, seguramente está utilizando su inteligencia lingüística. En cambio, alguien que destaca al hacer cálculos matemáticos y solucionar problemas abstractos ha desarrollado más su inteligencia matemática.
“La teoría de las inteligencias múltiples sostiene que las personas no tienen una inteligencia única, y aunque hay un componente heredable, también considera que esta es educable, que tiene que ver con el medio ambiente y las experiencias, se modifica a lo largo de la vida y se manifiesta en distintos frentes de acción”, explica el doctor Marco Antonio Rigo Lemini, investigador de la Facultad de Psicología de la UNAM.
Este enfoque, desarrollado en el siglo XX por Howard Gardner, investigador de la Universidad de Harvard, cambió las posturas dominantes en el campo de la psicología y el conocimiento popular, las cuales medían la inteligencia solo considerando habilidades matemáticas y del lenguaje.
Según la teoría de las inteligencias múltiples, recordó el investigador, la noción de inteligencia se extiende a toda clase de capacidades cognitivas humanas que sirvan para resolver problemas y crear productos valiosos en una cultura determinada.
Combinación única
Cada persona tiene una combinación única de ocho inteligencias, algunas más desarrolladas que otras, además son independientes entre sí. Por ejemplo, un joven autista puede tener una extraordinaria competencia numérica pero ser muy torpe para relacionarse con los demás, o una persona puede poseer un extraordinario talento musical, pero ser muy limitada para resolver problemas relacionados con lo espacial.
Esta perspectiva que ofrece la teoría de las inteligencias múltiples hace muy difícil comparar directamente la inteligencia de una persona con la de otra.
Lo que sí es posible, precisó Marco Antonio Rigo, quien es doctor en psicología educativa, es aprovechar esta teoría en algunos campos de la vida.
“En el ámbito de los cotidiano nos obliga a mirar de otra manera lo que significa ser o no inteligente y nos invita a tener mayor cuidado al usar este tipo de concepto con familiares o amigos. En la escuela, la teoría podría tener un impacto directo en el diseño de los planes de estudio y en la distribución de pesos y horarios académicos”.
Howard Gardner mencionó ocho inteligencias que han sido valoradas a lo largo de la evolución humana: lingüística, musical, lógico matemática, espacial, corporal cinestésica, interpersonal, intrapersonal y naturalista. Aunque podría haber una novena, e incluso, otras no contempladas hasta ahora.
Dirección Gral. de Divulgación de la Ciencia, UNAM
