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Debido a su función de reciclar la materia orgánica, las moscas son muy importantes para el medio ambiente y la sobrevivencia del ser humano, aseguró la investigadora Patricia Ramos.
"Siempre decimos: el mundo ideal sería sin moscas, porque ya no habría enfermedades, ni mugre, pero esto no es así, son organismos necesarios y con una función en el planeta”, comentó a Notimex.
“Si se muere un perro frente a la casa se va a generar un descompuesto, y si ya no hay moscas, el trabajo le queda sólo a las bacterias y hongos que se van a tardar meses en transformar la materia, de hecho, todavía se va a ver la presencia del perro, en cambio con las moscas en una semana ya nada más ves los huesitos", dijo.
La catedrática de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), enfatizó que si esos insectos dejaran de existir se acumularía la materia orgánica, “el tiempo en regresar eso al ambiente sería muy lento, bastante desagradable y más asociado a la presencia de enfermedades".
Explicó que por lo menos existen 17 mil tipos de moscas en el mundo, las cuales se han adaptado a los ambientes por miles de años, gracias a sus diversas características que van desde las que comen carne, frutas o las que comen de todo.
"Podemos tener las que se especializan en cadáver, por ejemplo la mosca negra, la que vemos en la casa come carne, productos en descomposición, también puede comer heces fecales, cualquier organismo, y también lo reciclan muy rápido al ambiente", detalló.
Patricia Ramos afirmó que uno de los descubrimientos más importantes que surgieron alrededor de estos insectos fue la interrogante de cómo la mosca podría transmitir enfermedades al llevar esporas y bacterias de un lugar a otro sin que ésta se enfermara.
"Nos preguntamos ¿qué tiene la mosca? Y esa observación tan ingenua ha dado uno de los mayores descubrimientos, pues el año pasado se dio a conocer que la mosca negra tiene uno de los sistemas inmunes más fuertes que existen en el mundo, porque efectivamente puede vivir con organismos, los tolera y no se enferma", apuntó.
La investigadora resaltó que esta especie generalmente del orden de los dípteros posee un sistema inmunológico “extremadamente competente" y que en la actualidad se trata de descubrir su semejanza con el del ser humano “y esto es porque nos parecemos mucho a las moscas negras, porque comemos lo mismo".
Refirió que durante los primeros años de la humanidad, los cadáveres no se enterraban y las moscas posaban sobre ellos, lo que generó repulsión hacia estos organismos. Asimismo, señaló que su asociación con afecciones y la descomposición de los alimentos provocó su rechazo.
“Los huevos y los gusanos no aparecen en la carne de la nada, es porque una mosca hembra los depositó, esa es la verdad, sin embargo, si no existieran las moscas padeceríamos muchas enfermedades, pero sobre todo un desequilibrio ambiental", reiteró.
jpe
